Cayendo Por Ti [Completa✓]

Capítulo 26| No Es Amor ¿Cierto?

¿Lo pidieron? Lo obtuvieron.

Disfruten el maratón. Los adoro mucho ❤️.

1/3.
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Leah:

Amanecer y sentir a Matt a mi lado de nuevo solo hace que algo se active dentro de mí, siento algo que no sentía hace mucho: felicidad.

Por un minuto, ahí, recostada junto a él, muero de miedo porque sentirme así de bien quizá sea producto de una cosa...

— ¿Por qué finges hacerte la dormida cada vez que despertamos juntos? —habla a mi lado y eso me hace sonreír.

Sí, agregaré a una de mis cosas favoritas el despertar con Matt.

— No me hacía la dormida, solo estoy despertando y asimilando que estoy viva —respondo a su pregunta con sarcasmo, estirándome solo un poco, me arrepiento de hacerlo ya que contra mí choca su erección mañanera.

Bonita manera de despertar...

Sin querer me pongo rígida al instante y él parece notarlo ya que puedo sentir el movimiento causado por su risa.

— ¿Pasa algo?

Suspiro, intentando alejarme de él antes de que el desayuno se convierta en otra cosa que precisamente no es comida.

— No —murmuro, alejándome de él con lentitud.

De nada sirve hacerlo ya que mis esfuerzos son en vano. Matt cruza su enorme brazo por encima de mi vientre, apegándome a todo su cuerpo.

— Mhm, te sentí tensa ¿quieres relajarte? —comienza a besar mi cuello haciendo que pensamientos muy impuros crucen por mi cabeza.

Perdón Diosito, tan temprano y ya yo estoy pecando.

— Matt —me río cuando lo siento hacerme cosquillas en las costillas—. Detente, me haces cosquillas.

— ¿Sí? —afinca el movimiento haciéndome reír más fuerte.

— ¡Basta! —comienzo a removerme sin dejar de reír.

— Buenos días, tórtolos —Alice se adentra en la habitación sin siquiera tocar.

Me incorporo en la cama, cubriéndome el pecho con la sabana.

— ¿Qué demonios? —es lo único que logro decirle mientras la miro con confusión.

— Prepararé el desayuno, Elena ya va despertar y no quieren que vea esto —dice, acercándose a donde estamos. Matt sigue recostado con los brazos detrás de la cabeza mirando a mi amiga con el ceño fruncido.

— ¿Siempre haces esto? —Matt ocupa la misma posición que yo y observa a mi amiga lleno de lo que parece diversión.

Alice chasquea su lengua.

— Fíjate que no.

— ¿Por qué entraste así, Al? Podíamos estar haciendo otra cosa —suspiro y me tumbo sobre la cama.

— Eso es lo que seguro quería ver, ¿verdad, Alice? —Matt suena socarrón a mi lado y yo le doy un codazo, todo lo hace a propósito con ganas de molestarla.

— Si piensas que quiero ver tu pene entonces tienes toda la razón —abro los párpados de par en par y vuelvo a mi posición anterior mirando a Alice con sorpresa, en serio no pensé que ella pudiera decir eso—. ¿Qué? Necesito ver el causante de tales gemidos anoche, tuve que utilizar audífonos.

Me enrojezco entera mientras que Matt no aguanta la risa. Jodidos imbéciles.

— ¿Quieres ver? —Matt abre un poco la sabana dejando ver una de sus piernas desnudas, parece divertido.