Detectives del Miedo

Parte 80: Clavo Oxidado

Carrie y compañía habían sido atacadas por un asesino serial conocido como Clavo Oxidado, que había sido manipulado para enfrentarlas.

Tras la confrontación lo habían logrado dejar inconsciente y ahora estaba atado a una silla en el baño, despertándose poco a poco.

"Uff..."

"¿Dolor de cabeza?"

"Siempre tengo dolor de cabeza..."

"Me alegro" - le sonrió Esther

La chica era la única que se encontraba allí, a una distancia prudencial y pelando una manzana que se estaba comiendo.

"........"

"¿Ahora te ha mordido la lengua el gato?"

"Jejeje..."

"¿De qué te ríes?"

"Todas vais a morir"

"Lo dudo" - dijo comiendo un trozo - "Tu por el contrario..."

"Zorritas más grandes que tu lo han intentado"

Esther puso una vez más su más fría expresión mientras se levantaba.

Puso el cuchillo en la pierna del asesino y poco a poco lo fue moviendo hacia su entrepierna. El hombre sin embargo ni se inmutaba.

"No vas a hacerlo"

"¿No?"

"No, una criaja no va a apuñalarme en la..."

"Cierto, cierto..."

Levantó el cuchillo y rápidamente le apuñaló en la barriga. Ella sabía dónde apuñalar sin que muriesen al instante.

"Uuuggh..."

"La primera es la advertencia... la segunda..."

"¡Maldita loca!"

"Cuanta hipocresía..."

"¡Voy a sacarte las tripas!"

"¿Eso es lo que les dices a todas por la radio?"

Era evidente que estaba disfrutando muchísimo esta pequeña sesión de tortura.

"Te crees muy graciosa, ¿no?"

"A veces lo soy, de una forma muy siniestra y caótica"

"........"

"Pero no es algo que me guste admitir"

"¿Y por qué me lo cuentas?"

"Porque estoy muy segura de que vas a morir hoy"

Por primera vez Clavo Oxidado pensó que quizás debía andarse con cuidado. La herida y su forma de hablar indicaban... experiencia...

No era una novata, de eso estaba seguro.

"Tu empezaste todo esto, Esther"

"Yo no hablé contigo por radio, a ver si te enteras"

"Era tu voz... la misma..."

"¿Y qué te dije?"

"Actuaste como una zorra, como una niñita que necesitaba..."

"Cuidado con lo que dices" - le advirtió con el cuchillo en mano

"Educación..."

"Y tu necesitas un mejor apodo... Clavo Oxidado"

"........"

"¿Es por la bebida? ¿O es porque ninguna chica se te acerca?"

"........"

"Supongo que será por lo segundo, porque si matas a todo el mundo..."

"Solo mato a quienes lo merecen"

"En ciertos aspectos puedo entender que lo merezca... ¿y ellas?"

"Están en mi camino"

"Me sorprende lo hipócrita que eres"

"........"

"Aunque que estés tan demente ayuda"

"¿No has escuchado lo que hago? ¿No tienes miedo?"

"¿Miedo? Yo tengo el cuchillo, tu estás bien agarrotado, yo soy la asesina... ¿a qué tengo que temer?"

"A mi..."

El hombre se lanzó contra Esther, que no dudó en apuñalarlo en el hombro tras reaccionar rápidamente y sin despeinarse.

"¡Aaaahhh!"

"Esa idea ha sido ridícula"

"Ahahhh..."

"Dime, Clavo Oxidado..." - dijo acercándose de nuevo a sus zonas intimas - "¿Qué te dijo esa voz que hablaba en mi nombre?"

"Tonterías..."

"Pero te dijo mi nombre, ¿verdad?"

"Te conocía... sabía cómo eras... y llamó desde aquí..."

"Supongo que poco más puedes decirme"

"........"

"La policía llegará en un rato, debo irme"

"¿Por qué?"

"Porque Judy querrá interrogarte con la ley por delante, supongo"

"Sabrán cómo eres..."

"¿Yo? Snif... pero... pero... si solo soy una niñita..."

Y tras esto se marchó de la habitación, bajando las escaleras para localizar a la oficial y sus indeseables compañeras.

Sin embargo, en ese breve espacio de tiempo un individuo con túnica negra entró y avanzó hacia donde estaba el asesino.

"Ahh... ¿quién demonios eres tu ahora?"

"Me llaman Ghostface..." - dijo alterando su voz con un modulador - "Soy un admirador tuyo..."