Redhead ; scarletwidow / Wandanat.

.5.

Me despierto agitada, tengo calor. Demasiada calor, diría yo. Recuerdo aquellas manos en mi cuerpo y un sudor frío me recorre. Los gemidos y jadeos de mi sueño aún retumban en mis oídos. Pero fue un sueño, sólo un sueño.

Me levantó precipitadamente de la cama, ganando un mareo en consecuena, me aferró a la pared con las palmas de mis manos y suspiro. Dios, esto es difícil. Jamás había tenido un sueño húmedo ni me interesaba tenerlo. Ni siquiera tengo un interés romántico. Agh, ¿por qué todo es tan raro?

Camino al baño, mojo mi rostro, noto mis mejillas ardiendo y mi cuerpo aún se siente caliente. Debería ducharme, sí. Eso es lo que debo hacer.

Me meto rápidamente a la ducha luego de despojarme de toda mi ropa, el agua cae sobre mi y masajeo levemente mi cuello, recordando la sensación de mi sueño. Aquellos labios dulces recorriendolo. Maldita sea.

Siento la necesidad de autocomplacerme. No es qué no me haya masturbado antes, es solo qué nunca ha sido pensando en alguien, y jamás había tenido la necesidad. Siempre fue por aburrimiento, y ahora sólo quiero hacerlo pensando en unos labios sin rostro.

Las imágenes llegaban a mi mente otra vez mientras mi mano bajaba lentamente por mi cuerpo, masajeando mis pechos lentamente, mientras ponía una mano en mi cuello, la otta masajeaba mi pezón, podía sentir la boca de aquel extraño adueñarse de el, su lengua juguetona enrrollandose lentamente, jalé un poco de mi pezón sensible soltando un gemido.

Esto era más de lo que yo realmente podía cargar en mi mente. El agua seguía cayendo mientras mi mano bajaba acercándose a mi sexo qué palpitaba por la necesidad de sacar esto de mi mente.
Lo demás es historia.

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Consigo dormirme a las 5 de la mañana y a las 7 ingresa a mi habitación una mujer joven de piel morena y sonrisa ancha.

-Buenos días, señorita Maximoff. Soy su nueva doctora de cabecera. Aubrey Plaza, para servirle. - La miro con mi mejor cara, sí es que tengo buena cara, sonrío y ella devuelve la sonrisa.

Es linda, un poco más baja que yo, aunque no sé que tan certero sea mi cálculo debido a que ella está de pie y yo sentada en mi cama. Sus ojos son de un color miel intenso, no para de sonreír. Eso es tétrico, pero su presencia es agradable.

Luego de realizar los requerimientos que Tony necesitaba para poder seguir respirando, me recomendó salir a tomar aire o hacer más ejercicio, ya que notaba que estaba fatigada y precisamente mi vida sedentaria no ayudaba a mi cansancio.

//... //

10 am. Tony está parado frente a mi insistiendo en que salgamos a correr. ¿Es necesario? Me noquearon hace un día y quiere que salga a correr. Pufff, menuda mierda.

Pepper pasa por detrás y me lanza una mirada de súplica, ella sabe que voy a ceder por hacerla feliz. Bien.

-Está bien... - suspiro. - pero sí me canso me debes una caja de mcdonals. - Él sonríe y asiente.

Me arreglo para poder salir con Tony. Decidimos empezar suaves, trotamos 15 minutos al rededor del parque y nos encontramos con una escena bastante impactante.

Bueno, la verdad para mí no tanto.

Pietro estaba siendo SUCCIONADO por la boca de Barton. Me reí por la cara de Tony.

-¿Acaso no lo viste venir? - suelto la típica frase que repite Pietro y Tony me mira con su boca en forma de O- Tony, se gustan hace mucho. Es obvio.

-Pe-pero... Pietro. Él... Barton tuvo esposa, tiene hijos. - Yo río y él bufa - Barton es un degenerado. Pietro es un niño.

-Sólo se llevan 6 años, Tony. Y Pietro ya tiene su mayoría de edad. Lo de ellos fue espontáneo. - Él sigue sin poder creerlo. Me genera gracia verlo cómo un papá celoso, a pesar de que Pietro no es exactamente amable con él.