Después del Fin.

24.

Nos devorabamos el uno al otro. Ulric me tenía sujeta con una mano, sus dedos estaban enterrados en mi pelo.
Me aparte jadeante, con el pulgar en su labio inferior.
Abrió los ojos despacio.
-Ulric...
Me dio un beso lento y profundo, y cuando se apartó, juntó nuestras frentes.
-Podemos parar si quieres.
-Esto no va a llegar a donde tu crees, Ulric.
-He dicho que te esperaré.
-Por qué? No quiero que sufras por mi.
-No está en tu mano, Nora. Lo llevas intentando días. Lo he notado. No está funcionando.
Maldito testarudo.
-Y si ese momento no llega nunca?
Se encogió de hombros.
-No se que va a pasar mañana, Nora. No puedo controlarlo. Se que esta pasando ahora. Se que tienes miedo. Y se que quiero estar contigo. Se que en lo más profundo de tu corazón también quieres estar conmigo.
-Te odio. - me escondí entre mis brazos.
No lo decía en serio, claro.
Me acarició el pelo con cuidado.
-De momento no tengo a nadie más, Nora. No te tortures.
-Y si me pasa algo? Y si te pasa algo a ti?
Me abrazo y besó mi hombro.
-Intentaremos que eso no ocurra.
Me dio otro beso en el hombro y levantó mi barbilla.
Se inclinó y me dio un beso en lo labios. De ahí, movió los suyos hasta mi mejilla y después al lado de mi cuello.
Me aferre a su brazo y cerré los ojos. Se sentía muy bien.
Quería seguir. Quería hacer esto. Lo quería a él...
-Ulric...
El hombre subió a mi ojera, mordiendo suavemente el lóbulo.
Jadee. Sus labios estaban en mi cuello otra vez. Lamia y mordía a su antojo. Tenía la piel herizada y no por el frío. Cada vez que apartaba su boca me mi piel me recorría un escalofrío. Me temblaba el cuerpo entero.
Giré mi rostro para besar sus labios. Dejé que mi lengua se colará entre ellos, lo que pareció gustarle porque me lo devolvió con más pasión.
Me aferre a su nuca. No quería que esto acabara. No quería que se apartara.
Su mano empezó a descender por mí cuello, haciendo suaves cosquillas allá donde iba. Por encima de mi camiseta, acarició mi pecho.
-No llevas...
-En medio de una crisis apocalíptica es lo que menos me importa.
-Quieres seguir? - pego nuestras frentes.
-Y tú?
Asntio.
-Seguro? Sabiendo que...
-No pienses más en eso. Por favor. Olvidate unos minutos.
Asentí despacio y lo besé una vez más.
Quería esto. De verdad que lo quería.
Me aferre fuerte a su camiseta mientras el acariciaba mi pecho.
Gemi cuando pellizco mi pezon.
Mire la puerta de la otra habitación. Estaba cerrada.
Nuestros besos fueron subiendo de temperatura, nos tocábamos allá donde podíamos.
Ulric empezaba a jugar con mis pantalones. Me tenía desesperada. Coló los dedos bajo la goma de mi ropa interior al tiempo que volvía a mi cuello.
Sus dedos llegaron al lugar donde más lo necesitaba.
-Oh cielos, Ulric...
Le di un corto beso en los labios.
Uno de sus brazos se encontraba alrededor de mi hombro, me sujetaba contra su cuerpo.
Cada vez aumentaba más y más el ritmo. Yo tenía que morder mi puño para no gritar.
-Ulric...
Me sentía tan bien...
Bese su cuello, deslizando los dientes por su piel y ganandome un gruñido.
-Nora... Tocame...-sonaba desesperado mientras buscaba mis labios.
Entre besos abrí su pantalón y metí mi mano en él, haciendo exactamente lo que me pidió.
Movía mi mano alrededor de su miembro al mismo tiempo que él lo hacía conmigo.
De su garganta brotaban unos sonidos increíblemente deliciosos. No podía creer que fueran provocados por mi.
Apreté los ojos. Ulric parecía saber exactamente qué hacer. Como si conociera mi cuerpo desde siempre.
-Ulric. Ulric... Voy...
-Shh, shh. - dijo jadeando mientras intentaba cubrirme la boca.
Me costaba mantenerme callada. El placer me recorría entera. Intenté besarlo, pero justo entonces llegué. Todo mi cuerpo tembló contra el suyo.
Se inclino a mi y me beso mientras seguía moviendo sus dedos en mi centro.
Me quedé extasiada unos segundos, mi cuerpo no respondía. Solo podía pensar en todo lo que estaba sintiendo.
-No pares, Nora... - suplicó cuando sintió que mi cuerpo se relajaba.
Aún con ese cosquilleo por todas partes, me incline sobre él.
Ulric sujeto mi cara con ambas manos, besandome despacio. Yo seguía moviendo mi mano alrededor de su miembro, haciendo que gimiera y temblara.
De repente se apartó de mi boca y dejó caer la cabeza contra el muro.
Jadee ante la imagen que tenía ante mi.
Respiraba con dificultad, se mordía los dedos para guardar silencio y tenía los ojos cerrados.
Yo estaba haciendo esto.
-No pares, Nora. - repitió.
-No lo voy hacer.
Besé su cuello.
Tenía el corazón acelerado, no lograba procesar lo que estaba pasando.
-Vamos, Ulric. - bese justo detrás de su oreja y después su mejilla.
Una de sus manos se encontraba en mi pelo, impidiendo que me moviera de ahí, que dejara de besar aquel rincón.
De repente aguanto la respiración, y unos segundos más tarde, se encontraba acabando en mi mano.
Se tapaba la boca con la mano y tenía el ceño fruncido.
Espere unos segundos para apartarme y limpiar mi mano.
Cuando volví hacia él, tenia una sonrisa en los labios y una mirada cansada.
Sonreí.
Tú también me gustas, Ulric.
Me senté a su lado y lo miré.
-Esperaré. - dijo casi en un sururro.