Diario de una madre adolescente "2" ( La venganza de Carlos) ( Terminada)

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No me di cuenta en que momento me quede dormido y desperté a la mañana siguiente cuando una enferma estaba revisando mis heridas por la molestia que esto me causaba.

-Buenos Días señor Miller, tiene mucha suerte su cuerpo cicatriza rápido.-

-Que bien.. ¿Ya puedo irme?

Ella comenzó a reír a un poco -No. Por supuesto que no, debe quedarse y guardar reposo porque eso no quiere decir que sus heridas se encuentren cerradas, pueden abrirse y seria horrible para usted- Dijo mientras terminaba de colocar la última venda. –Así que solo descanse y quédese aquí tranquilo.-Se alejó mientras tomaba sus implementos para salir de la habitación.

Me recosté de la cama nuevamente mirando hacia el techo, pensando en que necesitaba recuperarme rápido si quería comenzar a buscar a mi esposa y a mi hija.

Luego de un rato totalmente solo, vi a Alex entrar mientras tenía 2 jugos en la mano.

-Te traje esto amigo.-Me lo entrego para comenzar a tomarse el de él. – Pase una noche horrible, no pude dejar de pensar en tu hija y tu esposa-

-Yo no logre dormir casi nada.-Respondí mientras acomodaba el jugo a un lado de la cama –Quiero recuperarme para salir a buscarlas, además que necesito avisarle a mi Hijo que estoy bien, debe estar preocupado por nosotros.-

-Tu Hijo está bien. No te preocupes, llame esta mañana y ya tu tía lo sabe todo, el niño está bien y prometo que inventaría cualquier otra cosa para que no se preocupara.-

-Gracias amigo- Me sentí totalmente agradecido con él y con tanta ayuda que nos había brindado durante eso difíciles momentos –Para mí y mi familia significa mucho estaba ayuda que nos estas dando-

-No te preocupes Nick, ustedes son buenas personas y sé que se merecen muchas cosas buenas. Saldremos victoriosos de esta batalla, ya lo veras además..

No termino la frase debido a que el sonido de su móvil nos interrumpió.

-Un segundo.- Índico mientras tomaba el teléfono para alejarse un poco -Agente González- -Si- -¿Dónde?-Volteo a mirarme mientras su expresión triste cambiaba a sorprendida.

Yo esperaba que fueran buenas noticias para nosotros.

-Ok. Ok, voy a ir para allá- Colgó la llamada.

-Hermano tienen la ubicación de la camioneta, ayer estuvo en una estación de servicio a eso de las 7 de la noche y unos colegas conversando con los dueños de la tienda le mostraron una carta que fue escrita por tu esposa, pidiendo ayuda-

-¿Con eso pueden encontrarla?-

-Según el satélite indico hace aproximadamente 1 hora que estaban en (.....). Tengo que ir con un colega a buscarlas.-

-¡Espérame!-Comencé a moverme como pude y a quitarme todos los aparatos para bajarme de la cama.

-¿Qué estás haciendo?-intento acercarse para evitarlo.

-Por favor Alex.- Lo observe serio mientras tomaba la chaqueta que estaba en la mesa de al lado. –Se trata de mi familia, necesito encontrarlas.-

-Pero..

-Sabes que no voy a poder estar tranquilo si me quedo aquí solo.-

-¡Rayos Nick!-Se acercó hacia mí y tomo la chaqueta para ayudarme a colocármela

-¡Ay!- me quejaba por dolor de mis heridas.

-No sé cómo, pero te sacare de aquí ¿ok?- Me acerco como pudo una silla de ruedas para ayudarme a sentar.

Suspire al descansar de mi dolor cuando por fin estaba allí ubicado y el comenzó a empujar la silla hacia el pasillo principal.

-Rápido. Hacia la salida- Decía casi susurrando con miedo de que alguien me reconociera.

-No te preocupes. Diremos que ya te dieron de alta-

Siguió empujando la silla de ruedas hacia la salida hasta que finalmente logramos llegar hasta la puerta.

-Listo. Ya vamos a salir- Dijo mientras comenzaba a abrir la puerta para luego sacarme por allí.

-¡Un momento!-Se escuchó una voz femenina desde atrás. – Señor Miller ¿A dónde cree que va?-

Era la enfermera.

-Señor Miller, le advertí que no podía moverse de allí. –Tomo la silla de ruedas para regresarme hacia la habitación-

-¡Espere un momento señorita!- Dijo Alex en voz alta mientras buscaba algo en su chaqueta. –Agente González, FBI. Necesito llevarme al señor para una investigación importante y si usted interfiere con esta misión me voy a ver obligado a llevarla a la cárcel- Se guardó la placa e hiso un movimiento para dejar ver su arma. La enfermera comenzó a verse pálida.

-Oh.. Ohh no Agente- Soltó la silla de ruedas. –Disculpe por interferir con las misiones del estado, No volverá a ocurrir.-

-Eso espero señorita.- Tomo la silla de ruedas y comenzó a sacarla del establecimiento, tanto así que hasta la enfermera lo ayudo abriendo la otra puerta.

-¿FBI?- pregunte confundido cuando ya estábamos en el estacionamiento.

-Esa solo era mi placa de policía Local, tuve suerte- Comenzó a reír mientras se sentía victorioso y un muy buen actor.