Diario de una madre adolescente "2" ( La venganza de Carlos) ( Terminada)

61

Nos quedamos en un lugar del estacionamiento prácticamente escondidos esperando a que el compañero de Alex viniera a buscarnos.

-¡Rayos apúrate!. Acabo de mentirle a una enfermera diciéndole que soy del FBI- Decía mientras hablaba por teléfono.

Al cabo de unos 5 minutos más llego una patrulla de policía.

-¡Súbete Compadre!- Escuche decir al hombre que conducía mientras bajaba el vidrio del auto.

-¡Te dije que te apuraras Mario!- Grito mientras abría la puerta de atrás para ayudarme a subir.

-Mucho tráfico en la 57 amigo.- Se quejó mientras colocaba nuevamente sus manos en el volante. –No te preocupes, López y Mata ya están en el caso, están muy cerca de encontrarlos- Aseguro mientras me observaba por el retrovisor cuando Alex finalmente cerró la puerta luego de acomodarme.

-Déjame meter esta cosa en la maleta y nos iremos- Respondió Alex mientas doblaba la silla de ruedas.

El otro policía aún me observaba por el retrovisor.

-¿Te sientes bien amigo?- Pregunto al ver lo incomodo que estaba por el dolor de mis heridas.

-Si.- Dije mientras colocaba mi mano en la venda de mi estómago.

-Eres muy valiente, irte a salvar a tu familia aun cuando prácticamente te estas muriendo.. Waoo-

"Decir que me estaba muriendo en realidad no me ayudaba mucho".

-Bueno vámonos, rápido- Dijo Alex cuando se subía al auto –¡Arranca!, ¡Arranca!-

Comenzamos a avanzar e inmediatamente acomode mi cabeza en el asiento para descansar, me sentía bastante agotado físicamente. Solo pensaba en el momento de encontrar a Anna y a mi pequeña, mientras él hablaba con su compañero sobre los otros policías yo cruzaba mis dedos para que entrara alguna llamada que incluyera buenas noticias sobre el paradero de las chicas.

-¿Qué te han dicho los otros sobre la camioneta en donde van mi esposa y mi hija?- me metí en la conversación para así resolver las dudas que me estaban matando.

-No te preocupes amigo, tenemos patrullas en todas partes de la autopista de (....), anoche fueron vistos por aquellas zonas. Estamos seguros que no están tan lejos. Los encontraremos- Respondió el conductor mientras observaba la vía.

-Esta vez no fallaremos amigo- Alex volteo a mirarme. –Ya no estamos solos, lo atraparemos-

Ascendí con la cabeza en silencio mientras comenzaba a sentir una enorme ansiedad. Esperaba de todo corazón que ambas estuviesen sanan y salvas.

-Ahora tenemos otro problema- Indico Alex mientras se colocaba sus lentes oscuros –Tenemos a una madre desesperada por encontrar a su hijo, Al parecer el bebe también se encontraba en la camioneta en el momento del secuestro-

Comencé a recordar el grito que escuche justo antes de desmayarme en la parte trasera de aquel camper, seguramente se había tratado de ella.

-Pobre mujer.- Dije debido a que sentía mucha pena por ella y al mismo tiempo me sentía bastante avergonzado debido a que la desaparición de su hijo y interrupción en su hogar había sido ocasionado por nuestra culpa. Ahora sentía que no solo debíamos luchar por recuperar a Anna y a mi pequeña, sino también por ayudar a esa pobre madre a recuperar a su hijo.

Yo sabía exactamente la gran desesperación que se sentía al tener a un hijo perdido y sin ni siquiera saber cómo estaba. Cada hora, minuto y segundo eran agonizantes para la persona.

Seguimos nuestro camino hacia la zona en donde había sido visto antes la camioneta mientras esperábamos alguna llamada o señal que nos ayudara a poder encontrarlos.