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P. O. V  Sasha

La brisa me despeinaba pero me encantaba jugar con ella. Hubo un momento en el que cerré los ojos y me imaginé volando con el viento como un ave libre. Sonreí en mis adentros. Respirar un poco de aire fresco siempre tiene en mi un efecto espectacular. Jack me miraba de reojo. Tal vez creía que yo no lo notaba pero si lo hacía. Sentía su mirada recorrerme y analizar cada uno de mis gestos. Me gustaba, amaba que me mirara de esa forma. Los demás chicos estaban riendo, hablando. Apenas comenzaba el día y acabábamos de llegar al lugar.

Felicité a Josh por tener una idea tan maravillosa y por elegir un buen lugar. Luego me dijo que el lugar lo eligió Logan y también lo felicité.  Habían dos cabañas, no eran muy grandes ni lujosas pero no era nada que no se pudiera arreglar. Habíamos traído en la camioneta del Pastor Alvaro muchas cosas que nos servirían. Cerca de ellas se encontraba un arroyo donde todos nos daríamos un baño mas tarde.

—Aquella será nuestra cabaña. —se apresuró a decir Suely. Señaló la cabaña en la parte derecha.

—Pero..¡es la mejor cabaña!. —protestó Logan y era verdad, aunque no creo que le molestase mucho cedernosla.

Suely le sacó la lengua divertida. Lo que fue extraño, ella no suele hacer eso y menos con Logan.

—No es mi culpa que seas un lento. —bociferó.

—¡Ya veo que HAY ALGUNAS COSAS QUE NUNCA CAMBIAN! —gritó el castaño.

—¿Te refieres a mi? —esta vez la pelirroja no se reía, estaba enfadándose. Todos nosotros estábamos en presencia de el inicio de una típica pelea al estilo Suely y Logan.

—Vale chicos. ¡Ya basta! —ordenó Daniela— ¿Ustedes no pueden dejar de pelearse por una vez en su vida? Hemos venido a pasar un buen momento. Por favor.

Los incompatibles se miraron —prácticamente vi fuego en las miradas— y luego asintieron. Sigo pensando que aquí hay algo sospechoso.

Nos pusimos a trabajar. Pasadas tres horas mas o menos las cabañas estaban listas. Habíamos puestos las camas, organizado, barrido y todo lo demás. Sacamos una mesa gigante para fuera, este sería el lugar en que cenaríamos todos juntos.

—Quedó genial. —opinó mi novio abrazándome por detrás— Veo que estas relajada. ¿Te gusta este ambiente?

Asentí. Y le abracé también. Entonces mi estómago rugió. Al instante Jack hizo que sacaran la merienda, y juntos la devoramos.

—Chicos, que tal si vamos a bañarnos al río.

—¡Perfecto! —opinó Josh.

Fuimos a las cabañas para cambiarnos de ropa. Me sentí incómoda con las chicas nuevamente. No sabía que hacer o que decir, solo me limitaba a ver como Josh mimaba a Dani, se veía en sus ojos que ambos eran felices, así como en los libros de romance. Lo se porque también me siento feliz de tener a mi Jack, aunque aveces pienso que es más de lo que merezco y que lo puedo perder en cualquier instante. Y por otra parte veía a Suely luchar contra lo que siente por Logan, notaba la tensión que había entre ellos. No se si los demás piensan igual que yo pero creo que sus constantes peleas son debidas a su constante atracción.

Salimos del agua casi al atardecer . Se suponía que las chicas teníamos que cocinar algo para cenar. Entramos y mientras nos cambiábamos sentimos que alguien le puso pestillo a la puerta.

—¿Qué pasa? —preguntó Daniela.

La pelirroja comenzó a forcejear con la puerta, lo que fue un intento fallido, entonces se puso como loca.

The Sons of the King  [Novela Cristiana] (Editando) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora