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La noche anterior fue un total fracaso, ¿quien creería que algo así le sucedería al sensual nerd? Como también, ¿quién iba a imaginar que bajo su ropa escondía un cuerpo digno de un dios Griego? Exacto, nadie. Aunque tengo la sospecha de que Daphney ya lo sabia.

Vimos a Daemon en una etapa que nunca creí verla en el nerd. Cuando lo encontré después de haberlo visto huir, me lleve la sorpresa que estaba cambiado y de una manera muy ardiente. Llevaba unos vaqueros negros, unas converse y una camisa negra sin mangas, dejando ver sus tatuajes en los brazos. Lo mas que me sorprendió fue cuando un olor a alcohol choco con mis fosas nasales, cuando me acerque a él. Luego de eso logre convencerlo de regresar a casa para que descansara.

Ahora con Daphney hago un plan. Debíamos conseguir que Daemon fuera a la escuela mañana y que no se viera afectado -algo que era realmente difícil, pero no imposible- se que será en día en el que necesite de apoyo. Lo que le hizo la perra de Amy merece otra venganza, pero debo primero ayudar a mi amigo, ya que su estúpida manera de solucionar todo es mudarse a otro país.

- Le quiero partir la madre a la buena zorra de la maldita ardilla, quemarle el cabello -medita sobre algo y me mira- Te me adelantaste, la has dejado calva -río y Daphney sigue maldiciendo a Amy mientras apretando los puños y con una mirada llena de odio.

Creo que nunca había visto tanto insultó hacia una persona en una misma oración, pero con Daphney molesta todo era posible.

- Tengo un plan y en el estará tanto Daemon como tu -sonrío y una idea es plasmada en mi mente. Daphney sonríe de manera malévola moviendo las manos como si se sobara las manos a la vez.

- ¿Cuál es el plan? -pregunta con ese brillo en los ojos que me dice que está dispuesta a todo.

- Primero...-fui interrumpida.

- BEATRIZ ACOMODA LA COMPRA, LUEGO HAS DE CENAR PARA DAPHNEY H PARA TI, HOY SALDREMOS CON TU PADRE -grita mi madre muy delicadamente -sarcasmo-, mas bien parecía que la estaban matando.

- STEVEN -grite en respuesta y como buen sumiso llego corriendo a la habitación.

- ¿Qué quieres? -dice con voz cansada.

- Acomoda la compra por mi, yo saldré con Daphney -el asiente y se va.

- ¿y cual es el plan? -pregunta nuevamente Daphney.

- Deberás esperar, tenemos que salir y allá te cuento -tomando las llaves de la casa salí para salir a casa de Daemon.

***

- No, no y no -se negaba Daemon- yo no lo haré.

- Pero ¿debo ser yo? -pregunta Daphney abrazando su pies mientras estaba sentada en el suelo mirándome, asiento- pero, es que ¿yo?

- Si y si -les respondo a ambos.

- No creo que funcione...-comienza a decir Daemon, pero mi pies entro en su boca interrumpiéndole.

- Lo harán y punto, ahora debo de irme -le doy un abrazo a Daemon y arrastro a Daphney hasta la salida.

- ¡Aun no tenemos nuestro nombre! -grita Daemon desde la puerta de su casa y sonrío.

- Ya lo buscaremos -le respondí mirándolo mal, pues estábamos frente a él.

***

Hacia mis tareas hasta que quede dormida. La cama se sentía deliciosa y realmente cómoda. Si se me fuera permitido yo me casara con el señor cama y lo engaña con el señor comida.

Estaba soñando con alguien a quien no le puedo observar el rostro, solo sus labios. El chico acercaba unos muy apetecibles labios y sentía mi puedo acelerarse, es como si lo conociera. Sus labios rozaron los míos haciéndome querer desmayar, pero cuando levante la mirada logre ver unos ojos gris. Sentí un leve contacto pero cuando fui a responder...

Fingiendo ser gay©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora