Fingiendo ser gay©

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La puerta suena interrumpido mi shock. Estaba emocionada, pero de igual forma confundida, ¿será padre o novio de Jake?

La puerta continúa sonando y bajo la insistencia me levanto para abrir. Todos los chicos me observaban sonrientes como si supieran algo que yo no. Uno de los que estaba era Jake, estaba actuando normal, así que giré buscando con la mirada a Steven encontrándome que ya no estaba. Los dejé entrar a todos a la sala y Jared a mi lado que me tendió su celular mientras sonreía.

—¿Qué quieren que vean?

—B, se acabó, el entrenador perdió —dice sonriente Daphney.

—Me debes una —comenta Chad—. Mientras todos sujetaban a tu amorcito que luchaba por su damisela, yo encontré divertida la situación de un estudiante y un profesor peleando y los grabé.

—Si Jared lo hubiera golpeado hubiéramos roto vistas en YouTube —agrega Connor sintiéndose decepcionado.

—Pero no los deje subir el video —interviene Lexter—. Es tu vida B, no queremos fama a costa de tu vida privada. Sin embargo, entiendo que puedes denunciarlo, hacer que lo expulsen de la escuela, ¡tomar acción!

—Ustedes suelen ser idiotas, pero los amo —les digo sonriente.

—¿y a mi? —pregunta Jared.

—¿Quién eres tú? —mi cara es de poker y él ríe.

—También tengo el video de tu confesión —advierte Ian—. Por si quieres saber quién es él.

—¡TE MATO!

Iba directo a Ian, quien claramente moriría antes de si quiera reproducirse cuando por segunda vez, fuimos interrumpidos por las fuertes pisadas de Steven. Al vernos  a todos levantó la mano en despedida y corrió a la puerta. Contengo mis ganas de ver a Jake y observo a Jared que se muestra preocupado. Tomo su mano dándole un pequeño apretón, me observa y con una sonrisa deja un beso en mi mano.

—Ejem, estamos olvidando algo —habla Gaby.

—En realidad no —Lex levanta el celular y muestra la conversación con Amy—. Esto esta por acabar chicos.

Rixon segado por su sed de venganza se tragó toda la actuación y ahora esta planificando como acabar conmigo. Imaginaba que la preocupación de Jared era su primo, el debe estar pasándolo horrible. Su novia, su primo y su tío.

—No te preocupes por mi, yo estaré bien —beso su mejilla—. Recuerda quien soy.

—Eres mi dolor de cabeza, Beatriz.

***

Toco la puerta del director bastante nerviosa. Le pedí a los chicos que me dejaran a solas con él, este asunto era con el entrenador y no quiero involucrarlos en más cosas. Era el momento para resolver todo este desmadre que comenzó desde hacen años y por mi salud mental debía acabar.

—Pasa.

Abro la puerta para asomar solo la cabeza, el director al ver que era yo lanza una mirada de precaución y con la cabeza señala el asiento. Tomando una respiración profunda entro y tomo asiento.

—Que te trae por aquí, extrañamente no me he visto con la necesidad de citar a tus padres, castigarte o pedirte que no dañes a mi sobrino.

—Es algo serio, señor.

Me observa y asiente. Cierra la ventanilla de la computadora que donde tenia el juego de busca minas por terminar y coloca los codos en la mesa uniendo sus manos. Busco en mi celular el vídeo enviado por Ian ayer, coloco el celular en la mesa pero dejo el vídeo pausado.

—Durante años sufrí acoso, no era algo de lo que me quejara porque creía que era súper poderosa y resistiría por siempre. Además, siempre pensé que era algo que solo me afectaba a mí, que esta situación no dañaba a nadie. No se que hacer con esto, incluso si me ha dañado, no sé si deba contarle a usted porque quizás soy muy tonta y me preocupa el futuro de él.

—Beatriz, ¿podrías ir al grano?

—No, primero quiero contarle —retiro el celular de la mesa y lo observo fijamente.

—Si es lo que deseas, continúa, te escucharé.

—Como le dije, sufrí acoso y lo peor es que era por parte de un adulto —el rostro del director no mostró ninguna emoción, por lo que mentalmente le agradecí—. Yo solo deseo que desde su posición este más al pendiente porque quizás yo soporté hasta ahora, incluso encontrando un equilibrio, pero seguramente allá afuera hay alguien que no es tan fuerte, que se encuentre totalmente desamparada y no tenga los amigos que tengo yo.

Regreso el celular a la mesa y le muestro el vídeo. Cerro los ojos y soltando un fuerte suspiro tomo el teléfono de la oficina y habló con la secretaría para reunir al personal.

—No sabes cuanto siento esto, por favor perdóname por no ver lo que sucedía y esperar a que llegara a este extremo en el que fuiste tu quien viniste a mi para así poder actuar.

Por un momento pensé contarle lo de Rixon, decirle que no está bien, que tampoco esta viendo el monstruo que tiene por hijo y que por favor le busque ayuda, pero esta vez, siento que esa sería la decisión de Jared.

Agradeciéndole, salí de la oficina encontrándome a todos mis amigos en el pasillo quienes me recibieron con los brazos abiertos. En parte, agradezco al entrenador, me permitió ser la salvaje que soy hoy día y tener a estos amigos que me aceptan todo loca como soy.

—Vamos, tenemos que reunirnos todos, tu —señalo a Daemon— consigue como meterte en la oficina y da el mensaje que todos sean reunidos en el campo de fútbol en el almuerzo.

—¿Qué piensas hacer? —pregunta Marc grabando.

—Graba este día, mi amigo, hoy se acaba todo, pondremos fin —sonrío y tomo a Jared de la mano para ir a clases.

Dentro del salón me separo de Jared y me siento al lado de Jake. Comenzamos a copiar la pizarra los jeroglíficos del profesor que debía aprender para el examen final. Cuando encuentro el momento toco su hombro y este mira moviendo la nariz como si con ella me preguntara que pasa.

—¿Estás con Steven?

Listo, lo solté.

"Que delicada, burra. Nota el sarcasmo, nena" dice Condatriz.

—Sí, me sorprende que te lo haya dicho —se muestra tranquilo e incluso hasta continua copiando mientras me quedo petrificada de la sorpresa.

—¿Por qué te sorprende?

—Es Steven —levanta las dos cejas queriendo hacer ver que es obvio que no lo haría—. Estuvo dos meses teniendo relaciones conmigo, para notar que yo le gustaba y si le preguntas que si es gay, te dirá que no.

—Síndrome de Onodera Ritsu —susurro.

—Esto no es amor —susurra Connor a nuestro lado sorprendiéndonos—. ¿Qué? la hermana de Chad nos obligaba a ver esas cosas con ella.

—¡Necesito conocerla! —grito y automáticamente el borrador impacta contra mi cabeza.

—Esa fue la advertencia, Andersen.

***

Sorpresa ❤️ Los extrañaba :3 ¡aquí toy!

Ya escribí el siguiente, pero siento que aún le falta, así que solo publicaré esto y espero que parezca a como escribía antes 😩😭

Me reí bastante leyendo comentarios, así que muchas gracias 🥺❤️