-Imperio Romano-
10 años antes
Me levante de la muerte.
Si, jamás creí que esa frase se volviera realidad.
Lo último que recuerdo es una daga siendo clavada en mi frente; y de la nada desperté en un lugar brillante y blanco, pensé que era el cielo, pero sólo era un laboratorio.Estados Unidos me resumió todo lo que había pasado mientras estaba muerto, había pasado demasiado.
Me sentía desconectado de la vida, como si no tuviera nada que hacer ahí.
Pero me aseguro que sería más que bienvenido en Italia, que hasta me tirarían flores, así que me hizo sentir seguro de ir a buscarla.
Compre un ramo de flores color rosa, plantándome enfrente de la oficina de Italia. Leí que era muy amable y simpática, pero no quería dar una mala impresión.Mire un pequeño botón del lado de su puerta, tenía curiosidad sobre lo que era. Le pique, un pequeño sonido de campanas sonando.
Entonces para eso sirve.- ¡Espere un momento! - la voz de la que supuse era Italia gritó desde adentro.
Se abrió la puerta, una mujer esbelta asomándose, tenía el cabello hasta los hombros con flequillo marrón y ojos caramelo, tenia un Aura maternal.
- Hola - salude tímidamente.
- ¡AY DIOS MÍO! - se cubrió la boca asustada, mirando a otro lado.
¿Que se supone que debo contestar ante eso?.
Espere a que se calmara, mientras miraba a todos lados. No paraba de analizarme, como si no pudiera creer que estuviera enfrente suyo.- Estás vivo - me tocó el brazo como si esperara que atravesara.
- Si - asentí, mostrándole el ramo - Para ti.
- Espera espera espera - me jalo de la manga de la camiseta hacia su oficina sentándome en su cómodo sillón - ¿Como es que estas vivo?.
- Estados Unidos me revivió - le conteste acariciando el sillón, de verdad era muy cómodo.
- Maldita sea siempre tiene que ser el americano con sus cosas raras, ¿que no se puede relajar un momento y cocinar un pastel en lugar de hacer experimentos raros? - se quito el cabello de la cara colocándose unos lentes.
- Ya que estamos en el tema - coloque las flores en el sillón - Me mando aquí para que me dieras un trabajo o un puesto en el gobierno.
- ¿Que? - se giró a verme sorprendida, pero no positivamente.
- Siii... eh bueno algo así, yo apreciaría cualquier cosa de verdad - puse mis manos en mis rodillas algo incómodo por su reacción - Revivir en este mundo me dejo un poco confundido y me gustaría tener algo con que distraerme y no pensar tanto.
- Bueno mira Imperio Romano - se rascó la nariz, sentándose en la mesa con una mirada de pena - No tenemos espacio para ti, normalmente nosotros somos "representantes", representamos nuestro territorio valga la redundancia, pero tú no tienes territorio.
- Digo no necesariamente tengo que representar algo - me rasque el brazo incómodo - Soy muy bueno en las matemáticas, podría ser contador o algo parecido.
- No me estas entendiendo, así que voy a tener que ser un poco más dura contigo y discúlpame si sueno grosera - se cruzó de brazos - No confió en ti.
Asentí mirando el suelo.
- Discúlpame de verdad pero he leído tus libros y no dicen cosas buenas - Italia se levantó de la mesa - No dejaría a una persona como tú cerca de mi territorio, me costó mucho trabajo llegar a donde estoy y no quiero que mi trabajo se estropee por que un caprichoso americano decidió hacer su experimento y mandármelo a mi para que lo cuide.
- Entendido - me levante del sillón - Quédate con las flores.
Me aleje hacia la puerta, abriéndola y cerrándola con suavidad detrás mío.
No esperaba que la conversación fuera así, mucho menos pensé que me echarían de aquí, este fue mi territorio antes.Me tome un avión hacia Grecia, quizás ella podría ayudarme, si es que me recuerda.
Me abrió la puerta, estaba exactamente como la recordaba.
Chaparra, todavía le sacaba cinco cabezas, gordita, cabello ondulado dorado y nariz recta, tenía un traje formal blanco con joyería dorada, tal como sus atuendos anteriores.- ¿Romano? - me miró parpadeando varias veces con sus enormes ojos verdes cristalinos - No lo puedo creer.
Sonreí, agachándome para abrazarla, tuvimos nuestras discusiones antes pero me daba gusto ver una cara familiar.
- Disculpa que no te pude traer tulipanes blancos, no encontré por ningún lado - suspire entrando a su casa.
- No pasa nada, estoy mas sorprendida por tu existencia que por que no me trajeras flores - sacudió las manos sirviéndome un té que había preparado - ¿Entonces Italia no quizo ayudarte?.
- No - metí las manos a mis bolsillos - Pensaba que quizás tú podrías darme algún puesto.
Se tomo el té observándome, para luego agitar su cabeza en negación
- No tengo puestos disponibles peeeeeero - asentó la taza en la mesa de mármol - Con gusto puedo darte un lugar donde quedarte, tu dime que casa te gusta y yo te la compro.
- Gracias - sonreí mirando al suelo.
- Wow no puedo creer que Estados Unidos te revivió, digo, se que revivió a otros mas pero esto es un gran avance en la medicina.
- ¿Revivió a más? - le tome a la taza de té que me dio.
- ¡Si! - sacó un periódico pasándomelo - Esta URSS, Imperio Japonés, La Alemania e Imperio Azteca, me emociona saber que ella está viva.
- ¿Imperio Azteca? - levante una ceja.
- ¡Si! Me he leído todos sus libros, es una excelente guerrera y fue madre cuando apenas era una niña, un gran ejemplo a seguir si me preguntas a mi - me abrió la página del periódico donde salía ella - Mírala, es que es bellísima.
- Si... claro - me leí su parte.
Ella la habían recibido en un territorio llamado México, le habían comprado un terreno completo para ella sola y su hijo la cuidaba como si fuera oro.
Algo sobre leer que ella tenía la vida arreglada me hizo que me arda la sangre. Ella revivió y lo tiene todo sin necesidad de mover un dedo.
- Que interesante - susurre.
- Si, algún día deseo entrevistarla para mi podcast - me mostró un pequeño rectángulo negro.
- ¿Que es eso? - lo mire confundido.
- Mi teléfono - le pico a una bolita blanca en la parte de abajo, una luz saliendo de ella - Aquí hago mis podcasts y además investigo, es como si fuera una biblioteca, te resuelve todas tus dudas.
- Ya veo, ¿me puedes conseguir uno de esos? - levante el teléfono lentamente.
- Claro, yo te enseño a utilizarlo - aplaudió.
Lo primero que buscaría es la ubicación de este lugar donde está "Imperio Azteca". Quizás una charla con ella no vendría mal.
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No te vuelvo a perder
General FictionMéxico por fin tiene la vida que siempre busco con su novio Rusia y su hija adoptiva Sofi. Pero los problemas resurgen cuando Imperio Azteca desaparece sin dejar rastros junto con Imperio Romano. México deberá ir en busca de su madre sin saber si e...