Capítulo 45

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-Alemania-

Estoy... muy... borracho.

- quince minutos antes -

La fiesta se estaba poniendo buena, la pequeña ya había acabado de bailar así que ahora le tocaba a los adultos divertirse en la pista junto con la cumpleañera.

- Oye Alecito - Colombia se acercó a mi con una pastilla - ¿Quieres?.

Lo tome con una mano analizándola

- ¿Que se supone que es esto? - levante una ceja ante la pequeña bolita.

- Un invento mío, es alcohol concentrado en una pastilla, solo quiero probarla en las personas más fuertes - apunto a Méx y Rusia - Se los di a ellos igual.

Mire de lado a Méx que estaba completamente borracho en la pista y a Rusia normal, solo con una sonrisa torpe. Supongo que si a Rusia le fue bien a mi igual.

- Venga, por que no - tome la pastilla con refresco.

- Presente -

Ya veía todo medio borroso, pero no lo suficiente para tener que sentarme.

- Oye te estas tambaleando ¿estas bien? - Noruega pregunto viendo mis pies.

- Por supuesto - lo acerque más a mi.

De la nada sentí otra persona escondiéndose en mi saco, mire de reojo a Suecia, que tenía el maquillaje corrido y una mueca triste.

- Colección de Nórdicos - sonreí súper baboso - Falta una.

- ALEMANIA - Dina vino corriendo conmigo abrazándome.

Me tambalee otra vez intentando agarrar a los tres.

No entendí lo que me dijo, solo dijo "bla bla.. te quiero... bla.. tal y como eres... bla... corte con... bla"
Así que supongo que todo está bien.

- Colección completa, aunque faltan las mini minis - susurre.

- ¿De que hablas? - Suecia me miro de reojo - Estas borracho.

- Un poquito - les sonreí abrazándolos a los tres - Los quiero tanto vikinguitos.

- Nosotros igual te queremos - Dina me dio palmaditas en las mejillas.

- México -

- A QUE LES HAGO UN BACKFLIP 360 grados CON SALTO MORTAL - grite desde arriba de la pista del dj.

- No vas a poder boludo te vas a matar - Argentina me gritó.

- Si mejor mejor - Chile le callo la boca.

- VIVA YO CABRONES - grite antes de lanzarme según yo haciendo la maroma más grande del mundo, solo para estamparme de panza contra la pista - Sigo vivo.

- Si mueres, ¿tus terrenos son míos no? - Colombia me susurro.

- No - le grite levantando un brazo del suelo.

- Pues no te mueras hasta que cambiemos eso en tu testamento - me levanto del suelo con una mano.

Rusia se acercó susurrándome algo en ruso, a lo que extrañamente y seguro por andar bajo los efectos del alcohol, no entendí.

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