Capítulo 10

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- Imperio Azteca-

Después de tres días en un viaje largo por la carretera, llegamos a Francia.
La ciudad era otra cosa, muy bella a su manera.
Todo estaba limpio y su gente caminaba por la calle hablando entre ellos o en sus celulares.

- Quede con esta chica en vernos en un café para que me dijera donde lo vio - Iraq le mostró el teléfono a Vene.

- Ahorita vamos - le acelero para ir más rápido.

Llegamos al lugar donde quedaron en verse, no sabemos nada de la chica pero al parecer ha estado en contacto con URSS últimamente.
Entramos viendo alrededor, solo había una chica sentada en una mesa lejana, cuando nos vio se levantó rápidamente

- ¿Ahmed? - la chica le pregunto a Iraq.

- Ese soy yo - sonrió - mucho gusto.

Venezuela se giró a verme, con la cara roja por que se estaba aguantando la risa.

- Me dijiste que sabias donde estaba mi amigo - siguió hablando.

- Si, lo se, por que es mi jefe - nos sonrió.

- ¿Tu jefe? - se giró Vene confundido.

- Compró un bar para ser dueño de él - nos miró a todos - Me sorprende que tenga amigos.

- ¿Por que te sorprendería? - pregunte.

- Por que él es un hombre muy... triste... es serio y tiene cara de enojado todo el tiempo pero aún así siempre esta decaído o borracho - se rascó el brazo incomoda - Suele ser amable a veces pero no siempre.

- ¿Nos podrías decir donde se queda a dormir? - sonreí - Queremos ayudarlo.

- Vengan mañana a las diez al bar - nos entrego una tarjeta de presentación - Lo encontrarán ahí.

Todos asentimos, Iraq tomando la tarjeta y la chica yéndose.

- Eso fue fácil - Venezuela sonrió - Un pasó más cerca de la libertad.

- ¿Que podemos hacer mientras tanto? - Les pregunte, mirando a todos los del café que no dejaban de verme - ¿Por que me están viendo?.

- Eres muy alta - Iraq me dio una palmada en la espalda - Yo igual te vería si no te conociera.

Y en realidad si, comparada con todos, yo les saco entre una y dos cabezas. Me hacía sentir extraña, como si fuera un monstruo.

Salimos del café, ambos con un pan en la mano por que tenían hambre. Yo solo tenía un café, no se por que se me hizo tan adictiva esta bebida.
Ciudad de México me la enseño, me dijo que no le gustaba pero que lo ayudaba a estar despierto.

- ¡¿DISCULPA?! - me gritó alguien en la calle.

Me giré a ver un hombre chaparro con bigote y gorra, me alcanzó sudando, parecía que había corrido.
Iraq y Vene se acercaron poniéndose enfrente mío tapándole El Paso al chico.

- Perdone su sueno atrevido - se tomó del pecho respirando hondo - ¿Eres modelo?.

No se que es un modelo, agite mi cabeza diciendo "no".

- ¿Enserio? - se levantó - Podría jurar que eres una, tienes hasta la altura y la complexión, ¿has pensado en serlo?.

- No, déjala en paz - Iraq intervino enojado.

- Lo digo con la mejor de las intenciones - levantó las manos - Creó que podría ser una excelente modelo.

- Lo hablaremos con ella - Vene tomó el hombro de Iraq para seguir caminando.

- Cualquier cosa llámame - me dio una tarjeta, alejándose corriendo para alcanzar un autobús.

La tarjeta decía:

Antoine Chandler
Editorial Photographer
xxx-xxx-xxxx

- ¿Que Es un editorial photographer? - me giré a Iraq.

- Luego te explico - me jalaron para irnos.

- Ciudad de México -

Cuando no entiendo algo, suelo consultar con un buen libro para que me explique y resuelva mi duda. Lo hago más que nada con los representantes.
En un mundo tan moderno, el internet podría funcionar, pero esta tan editado y tan lleno de mentiras que con solo ir a la parte de biografías históricas, puedo encontrar la historia de cualquier representante.

La actitud de Alemania me dejó un poco confundido.
Normalmente que te digan que eres Perfecto es un cumplido, pero se lo tomo demasiado a pecho, como si fuera un insulto.

Así que para no cometer el mismo error, compre su autobiografía

"La vida de Alemania, escrito por historiadores y él mismo".

Me senté en el sillón de la oficina, abriéndolo en la primera página donde aparece una foto de él de bebe y su hermana, cuando se inventaron por primera vez las fotografías.
Se veía joven, con el cabello y ojos más oscuro que su hermana. La hermana tenía las facciones perfectas, pequeñas y preciosas.
Mientras que Alemania se veía más tosco y fuerte.

Pase a la siguiente pagina sobre su niñez.

Padres humanos los recogieron después de salir de la tierra, al parecer esa familia se los iban pasando por generaciones para que los cuidaran, los Weber se dedicaron a ser conocidos como la familia de los representantes.
Ambos trabajaron en una tejedora industrial hasta que el gobierno nos reclamó como "tesoro nacional" en 1800.
Pero eso no explica por qué duda tanto de su físico.

Me pase leyendo su libro todo el día, solo explicando sus hazañas y valientes actos en la militar. El libro había censurado todo lo ocurrido en la Segunda Guerra Mundial, saltándose todo ese tramo y siguiendo después de ella, de como fue a terapia, de recuperó y se convirtió en un líder ejemplar.

Su hermana murió, la causa no fue especificada, solo murió después de la Segunda Guerra Mundial.

Esto me dejó con más dudas que respuestas
¿por que borrarían todo el tramo de la Segunda Guerra Mundial?, se supone  que es parte de su historia.

Quizás si compro el libro de alguien más lograre ver que ocurrió en ese tramo.

Encargué por internet la autobiografía de Estados Unidos e Inglaterra, titulados

"La extraordinaria vida de una potencia; escrita por Estados Unidos"

Y "La historia de Inglaterra", bastante simple pero servia.

Ahora solo tenía que esperar a que me llegaran, o ir a preguntarle personalmente.

- Señor - mi secretaria tocó la puerta - Ya esta lista su cita en el salón.

- Muchas gracias - sonreí.

Ya por fin tendría el cambio que buscaba.

No te vuelvo a perder Donde viven las historias. Descúbrelo ahora