14. ¡Bienvenido a lo que eres, realmente!

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Lo siento porque su servilleta desde el día de ayer tiene los dedos de gelatina, para estar publicando accidentalmente el cap, y después anularlo, ¡Las amo, bbxs! 💍




— Lo sentimos estimada cliente, el boleto que usted solicita en estos momentos no están siendo validados, debido a las condiciones climáticas del lugar de origen al que usted busca llegar. — Pausó la señorita que ya antes le había atendido en la caja de boletería allá en el aeropuerto. — Lamentamos los inconvenientes, señora. Por favor, vuelva a intentar más tarde. — Young Mi quiso estallar de los nervios que ya venían burlándose de ella desde hace ya un buen de tiempo, en dónde su esposo le confesó que Yoon Gi había enfermado, motivo por el cuál estaba hospitalizado y por si fuera poco en Japón que fue el país que menos tuvo en mente a la hora de querer averiguar el país en el que se estaba quedando.

Un escalofrío recorrió su cuerpo, al recordar precisamente el pasado en dónde Yoon Gi pareció una situación similar. Sintiéndose mal consigo misma, no pudo evitar culparse por no haber podido ser una buena madre, al menos lo suficiente como para tener la confianza que en algún momento desapareció entre ellos. Nisiquiera cuando le pidió perdón, mencionó algo respecto a su salud que seguramente ya venía deteriorándose poco a poco.

— Tenemos que volver, acabo de afirmar por el clima que la tormenta es peligrosa para abordar un avión.
— ¡No entiendes Hee, Yoon Gi está postrado en una maldita camilla de un hospital completamente solo!
— ¡Exactamente, pero si tuviera magia podría desaparecer la tormenta! — Pausó. — Él está bien, se que es fuerte.
— ¿Me prometes que iremos en cuanto antes? — Él hombre asintió.
— Sabes que sí. — Young Mi suspirando pesado, se resignó a volver a casa. Al no tener más posibilidades para abordar un avión lo más pronto posible a Japón.
— Mamá llegará pronto, Yoon Gi...



— ¿Cómo sigue? — Preguntó Nam Joon a Tae Hyung quién revisaba sus signos vitales en la máquina que registraba perfectamente cada latido de Yoon Gi.
— Afortunadamente bien, sus signos vitales han mejorado muchísimo. — Exclamó aliviado Tae Hyung, antes de acariciar la cabellera perfectamente blanca del hombre que aún se mantenía dormido en la camilla.
— Solo queda esperar a que despierte.
— ¡Dios, eso sí que es tener una fortuna de gato negro! — Exclamó Nam Joon.
— Mhm, solo hay que asegurar que esto continúe para que puedan darlo de alta.
— ¿No ha venido Ji Min? — Preguntó curioso él más alto. No obstante, Tae Hyung frunció el ceño en cuanto escuchó aquel nombre ser pronunciado. — ¿Tae Hyung...
— Él vino unas horas después de que fue internado, afortunadamente no tuvo contacto con Yoon Gi. — Interrumpió con la mirada molesta.
— No quise ser arisco, pero lo mejor es que ellos no tengan contacto. — Pausó. — Desconocemos la situación entre ambos, y hasta que Yoon Gi no especifique que ha sucedido en realidad, él no podrá verlo.
— ¿Y dónde has dejado al chico, uh?
— No sé, simplemente pedí a seguridad sacarlo al molestar la paz de mi paciente. — Gruñó.
— Tae Hyung, pienso que esto carece un poco de lógica para nuestra ética. Sabes bien que él chico depende enteramente de Yoon Gi, ¿Por qué dejarlo a su suerte? Permite mínimamente que esté dentro de las instalaciones, recuerda que ahora mismo está azotando una tormenta. — Exclamó antes de mirar la gran ventanilla de la habitación de Yoon Gi, que permitía perfectamente mirar la ciudad cubrirse de nieve espesa.
— Lo hubiese hecho si él verdaderamente estuviese solo. Pero como iba junto a otro más, creo que sabrá arreglárselas a solas. — Nam Joon arregló su bata para así negar
— ¿Y como estás tan seguro que ambos son cercanos? — Pausó. — Tal vez solamente coincidieron. — Tae Hyung negó totalmente convencido.
— Recuerdo perfectamente que aquel muchacho, aparentemente menor que Ji Min. Ya lo había visto en el pasado, no sé su relación pero no dudó de mi intuición sobre esos dos.
— De acuerdo,de acuerdo ¿Y al menos hablaste con él? O solamente te dedicaste a enojarte. — Tae Hyung apretó los labios al ser pillado. Nam Joon por el contrarió suspiró y se acercó a abrazarlo, de manera que su bonita cabellera apenas y cayó en el costado de su hombro derecho.
—¿Qué haré contigo?
— No pude evitarlo, lo siento. — Pausó. — ¿Pero que sentido tendría esto?
— Supongo que no haríamos demasiado, pero por lo menos se consideraría su versión, ya que Yoon Gi por el momento sigue inconciente. Supongo que de esta manera podríamos o hubiésemos podido averiguar algo.
¿Crees que aún logremos encontrarlo?
— No lo sé, han pasado un par de horas.
— Tomaré turno pronto, así que iré a vagar al exterior, solo por si acaso. ¿Quieres acompañarme? — Tae Hyung sin tener nada más que hacer asintió.
— Si me entero que saltaste nuevamente turnos y peor aún que te han cubierto tu falta, no lo perdonaré.
— ¡Te prometo que no, ya vámonos!

▪️EN LA PENUMBRA DEL OLVIDÓ || PJM ✧ MYG ▪️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora