Abigail
Lo veo alejarse, se pierde entre las personas del parque mientras yo me quedo mirando como desaparece.
Una interrogante se forma en mi cabeza y se le suman muchas más.
¿Será casado? ¿El mensaje que recibió será de su esposa? ¿Por eso se puso nervioso y se fue?
Y muchas más inundaron mi mente, moví la cabeza de un lado a otro alejándolas, Edward no me importaba así que no tenía por qué interesarme su vida.
Un sonido proveniente de mi teléfono me distrae de los pensamientos, un recordatorio ilumina la pantalla, es hora de volver a casa tengo cosas que tratar.
Me dispongo a caminar cuando inconscientemente me giro y vislumbro por donde se fue Edward, me quedo viéndolo unos segundos antes de comenzar a caminar.
¿Qué estás haciendo con mi mente, Edward?
•✦───────────•✧
—¿Llevas el diario?
—Sí, mamá. —me quejo con Aisha.
Estamos hablando por teléfono y muchas veces se comporta un poco intensa cada vez que voy al hospital.
—¿También llevas tus medicinas?
—Que sí. —repito por no sé cuanta vez en el día, ya perdí la cuenta.
—¿Y recuerdas los ejercicios respiratorios por si tienes un ataque de pánico?
—No te preocupes que no voy a morir ahogada, voy al mejor lugar para tener un ataque de pánico, seguro que van a saber que hacer. —digo en tono jocoso.
—No bromees con eso, Abby.
Rodeo los ojos.
—Lo siento, pero te llamé para que me tranquilizaras no me alteraras más. —le explico con tono calmado.
—Lo siento, a veces soy un poco intensa.
—¿Solo a veces?
—Oye, no te pases. —reímos.
—Bien, ya se reconciliaron —se escucha de fondo la voz de Jack—. Entonces, Aisha deja que Abby se vaya que va a llegar tarde.
—Está bien —la queja de la menor de los Stuart me hace reír—, nos llamas en cuanto salgas del hospital.
—Sí, sabes que hoy salgo tarde porque tengo que ir a dos consultas y eso se tarda muchísimo.
—Entonces llévate alguno de los libros que he dejado en tu casa, así te entretienes hasta que te toque.
—Aisha, no seas manipuladora, no puedes obligar a Abby a leer tus libros cursis.
—No son cursis, son de romance, que nadie te ame no quiere decir que los demás sean infelices.
—Vale ya —los paré ante que comenzarán a pelear—, sí lo voy a leer.
—Está bien, Abby. —podía oír la sonrisa de Aisha al otro lado del teléfono.
—Les hablo después, adiós amores.
—Adiós, Abby.
—Hasta luego abejita.
Colgué el teléfono con una sonrisa, sabía que está llamada me calmaría.
Busqué en mi cuarto hasta que di con uno de los libros que Aisha había dejado, Obsidian de Jennifer L. Armentrout sería mi compañero por las próximas horas. Tiempo que esperaba fuera lo más calmado posible.
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Luces y sombras ✓
RomanceSu pintura esconde un secreto y él hará lo posible por descubrirlo. •✦───────────•✧ Abby esconde su dolor tras una pintura con luces y sombras, nadie va a descubrirlo, o eso creía hasta que conoce a un crítico de arte que se empeña en descubrir s...