I'll be your hero [Harry James Potter]

-LXIII-

-Podemos colocar polvos para eructar en su bebida-Dijo Fred.

-No-Dije.

-¿Y si llenamos su habitación de bombas fétidas?-Pregunto George.

-No-Respondí.

-¡Ya se! Podemos darle un jabón de huevos de rana cuando quiera ducharse-Dijo Fred.

-¡Que no!-Exclame riendo.

Los gemelos están completamente furiosos con Harry por no haber recordado mi cumpleaños, Hermione me contó que el lo había olvidado por completo y ella y Ron se enfurecieron tanto con el, que le dijeron que si no tenía un regalo para mi para compensarlo, ni se le ocurría ir a mi cumpleaños, Ron le dijo que no merecía estar ahí y llevar el crédito del esfuerzo que cada uno de ellos tuvo para mi cumpleaños, quienes si lo recordaron y quienes si me hicieron un regalo, que el hecho de ser "el campeón de Hogwarts" no le daba el derecho de olvidar mi cumpleaños.

No debería sentirme mal por esto, no es su culpa no haberlo recordado, pero incluso Draco me hizo un regalo y eso si que no lo esperaba. Supongo que tiene la mente en otra parte.

Hoy es la primera prueba del Torneo, los chicos ya están esperando antes de salir, estamos entrando a una especie de estadio gigante que armaron, podemos ver en el centro una gran pila de rocas, ahí deben colocar a cada dragón.

-Si no estás de acuerdo con eso, entonces partiremos con las apuestas. Agarra la caja-Dijo George dándome un cajón donde colocan apuestas sobre los cuatro campeones.

-No se les escapa nada, ¿verdad?-Prgunte riendo.

-Claro que no-Dijeron al unísono.

Caminamos entre medio de los estudiantes.

-¡Apuestas, hagan sus apuestas!-Exclamo Fred.

-Anímense amigos, ¿quién quiere apostar en la masacre de hoy?-Pregunto George.

Me puse a reír mientras algunos le apostaban a Viktor, otros a Cedric.

-¿Quién quiere apostar?-Pregunto George.

-¡Los momios indican que Krum sobrevivirá!-Exclamo Fred.

-Hagan sus apuestas, 10 a uno-Dijo George.

-¿No se han puesto a pensar que puede ocurrir algo muy malo y ustedes están apostando?-Pregunte mirando a los gemelos cuando nos sentamos.

-Oye eso no pasará-Respondió Fred.

George se sentó al lado de Eleonor, Fred a mi lado y las chicas abajo.

Eleonor se puso roja de inmediato, todas la quedamos mirando.

-¿Te pongo nerviosa Brown?-Pregunto George.

-Oye no coman en frente de los pobres-Dijo Fred.

-¿De qué hablamos sobre coquetear con mis amigas Georgie?-Pregunte mirándolo.

-Tengo permiso de hacerlo, así como tu lo tienes con Legan-Respondió George.

-Logan-Dije.

-¿Tanto te lo sabes?-Pregunto George bromeando.

-¡Oye!-Exclame riendo.

De repente se escuchó un cañón, ya empezó la prueba y para mi sorpresa, el primero en participar es Cedric, tiene que quitarle un huevo de oro al dragón Hocicorto sueco, por suerte no le tocó el dragón colacuerno, ese si que da miedo.

Cedric entró en la prueba, se nota que está algo nervioso, transformó una piedra en un perro, logrando distraer al dragon consiguiendo el huevo de oro, aunque recibió una quemadura en la mejilla.

Tendré que curarla después.

Después de el apareció Fleur, a quien le tocó el dragón Galés verde, es un buen dragón, en la Reserva de Criaturas Mágicas hay uno. Ella puso en trance al dragón y este se quedo dormido, pero en un momento roncó y le lanzó una bocanada de fuego que le quemó la falda, todos nos quedamos en silencio absoluto, pero ella logró apagar las llamas lanzando un chorro de agua desde su varita.

Debió doler esa quemadura.

-¿Olivia?-Pregunto la profesora Sprout.

-¿Si?-Pregunte girándome a verla.

-Madam Pomfrey la necesita, venga conmigo-Dijo la profesora Sprout.

Me levanté y la seguí hasta la carpa de donde salen los participantes, Fleur esta en una habitación aparte ya que está sin su falda.

-Querida yo estoy ayudando a tu primo con su quemadura, necesito que me ayudes por favor-Dijo Madam Pomfrey hacia mi.

-Claro con gusto-Dije sonriendo.

Harry me quedo mirando, con intención de decir algo, pero no lo hizo.

-Señorita Diggory, no tuve oportunidad de desearle un buen cumpleaños el otro día-Dijo el profesor Dumbledore.

-No se preocupe-Dije sonriendo.

Entré a la habitación aparte en donde Fleur me miró sonriendo.

-Es una quemadura algo grave, espero no te duela mucho-Dije sonriendo.

Tomé un par de pañuelos antes de limpiar la herida.

-Ten un poco de poción, te sentirás mejor, claro que lamento tu falda, es muy hermosa-Dije extendiéndole un frasco de poción de Wiggenwald.

Fleur me miró extrañada.

-¿Ocurre algo?-Pregunte.

-¿Pogg que eres tan buena conmigo?-Pregunto Fleur.

-¿A qué te refieres?-Pregunte deteniéndome.

-No es por menospreciar a tu escuela, pego hay algunas muchachas que me han mirado mal, puedo escuchar las cosas que dicen...me pagece extraño que seas tan amable-Explico Fleur bajando la mirada.

Quedé sorprendida, no pensé que ella fuera mala, quizás algo superficial pero no es nada malo.

-Descuida, supongo que a todas les incomodo que todos los chicos se volvieran locos contigo-Dije riendo.

-Pego no lo hago con querer-Dijo Fleur triste.

-En serio quédate tranquila, si en algún momento quieres hablar con alguien, eres más que bienvenida a mi grupo de amigas-Dije sonriendo.

-Eges muy amable, ¿Liv?-Pregunto Fleur.

-Mucho gusto-Respondí extendiendo mi mano.

Seguí hablando un poco más con Fleur mientras curaba su herida, es lo menos superficial que he podido conocer, de hecho es muy carismática, es muy directa para decir las cosas, supongo que ese es el defecto que le encuentran las demás.

Mientras que estaba con Fleur, Viktor salió a su prueba contra al dragón Bola de fuego chino, por lo que escuchamos, le lanzó la maldición conjuntivitis para cegar al dragón, logró recuperar el huevo de oro, pero el dragón quebró un par de huevos.

Con Fleur ya curada, caminamos junto al profesor Dumbledore para ver a Harry, es el último en salir.

Harry usó el hechizo de invocación para convocar a su escoba, la saeta de fuego que nos regaló Sirius el año pasado, lamentablemente le tocó el dragón Colacuerno Húngaro, realmente da miedo ese dragón.

Por suerte no salió quemado, estuvo sobrevolando el estadio para conseguir el huevo, el dragón en un momento casi se soltó, pero no lo logró.

Por suerte, todos salieron bien de la prueba.