I'll be your hero [Harry James Potter]

-LXXXI-

Olivia.

-¿Por qué no puedo ir papá?-Pregunte hacia Sirius.

Después del funeral de Cedric, con Sirius vinimos a vivir a su antigua casa, la cual heredó, el número 12 de Grimmauld Place.

Es el cuartel de la Orden del Fénix, Hermione y Ron deben estar durmiendo, también los gemelos y Ginny, Molly y Arthur deben estar despertando también.

No pude contarle nada a Harry en las cartas, me siento horrible por ocultarle información, pero la muerte de Cedric no es algo que se puede ocultar, todos hablan de una nueva guerra, pero el Ministerio no lo quiere aceptar.

Yo duermo en la habitación que era de mi tío Regulus Black, el hermano menor de Sirius que murió hace unos años, durante la primera guerra mágica, Sirius dijo que tirará las cosas de él a la basura, pero no lo hice, simplemente las guarde en un armario, sin romper ninguna.

Me mostró el tapiz ridiculo de la familia Black, también me presento a mi tía Andromeda Tonks, con su hija, mi prima Nymphadora Tonks, aunque ella odia que la llamen así.

Mi padre Aidan, si es que puedo seguir llamándolo así, no ha dado señales de vida, solía tener una buena relación con él pero esto se ha quebrado con su nulo apoyo por la muerte de Cedric.

-Solo me dices papá para que deje que vayas jovencita-Dijo Sirius.

-Te juro que no papá, lindo, amoroso, el mejor papá del mundo-Dije abrazándolo.

La Orden del Fénix quiere ir a rescatar a Harry de sus tíos, al parecer sufrió un ataque de un dementor y estoy demasiado preocupada por el, no es normal que un dementor lo haya atacado fuera de Azkaban.

-¿Por qué tienes tantas ganas de ver a Harry?, lo ves todo el año, yo debería ir porque soy su padrino-Dijo Sirius.

-Si te ven afuera te encerrarán-Dije.

-Buen punto, aún así no iras-Dijo Sirius.

-Pero papá...imagínate la aventura, la adrenalina de estar en una misión, ¿por qué no quieres que tu hija viva la vida?-Pregunte.

-Porque eres mi responsabilidad, ves a Harry todo el año, y cuando llegue acá volverás a verlo. Oh...ya entiendo porque tanta insistencia-Dijo Sirius mirándome sonriendo.

-Me da escalofríos esa sonrisa-Dije mientras bostezaba.

-Mi linda hija está enamorada de Harry-Dijo Sirius emocionado.

Me sonrojé en un segundo.

-¡Papá no digas esas cosas!-Exclame nerviosa.

-Aunque la idea de que mi hija adorable tenga novio me desagrada, me gusta que sea Harry, el hijo de mi mejor amigo con mi pequeña. ¡Un Potter en mi familia!-Exclamo Sirus.

-Papá estás delirando-Dije colocándome cada vez más nerviosa.

Es verdad que sigo sintiendo algo por Harry, pero no me siento preparada para estar en una relación después de lo de Logan y Cedric.

-Ya puedo imaginar a los pequeños Potter Black corriendo por la habitación, ¡diciéndome abuelo!-Exclamo Sirius riendo.

-¡Tío Lupin, mi papá está hablando incoherencias!-Exclame caminando hacia la cocina.

-¿Quiere casarte con Harry de nuevo?-Pregunto el tío Lupin cuando llegue a la cocina.

-Y no me dejo ir con los demás a buscar a Harry-Respondí tomando un vaso con leche.

-Porque es arriesgado Liv-Dijo el tío Lupin.

-No es justo-Dije cruzándome de brazos.

Sentí que tocaban la puerta y Sirius fue a abrir, vienen los de la Orden.

-¡Tonks, sobrina querida! Que gusto verte, ¡Olivia esconde el ron!-Sirius grito.

Observé que el tío Lupin se arreglaba el pelo mirando su reflejo en un plato al escuchar el nombre de Tonks.

-Parece que tendré un primo pequeño pronto-Dije riendo.

-No hablemos de amor Olivia-Dijo el tío Lupin riendo.

Me puse a reír mientras escondía el ron, Tonks corrió hacia mi para saludarme.

-¿Cómo está mi prima favorita?-Pregunto Tonks.

-Con ganas de ir con ustedes, llévame contigo Tonks-Respondí sonriendo inocente.

-No te puedo llevar, ya me dejaron ir a mi-Dijo Tonks riendo.

Tonks es la más joven en la Orden, está recién graduada como aurora.

-Me gusta la actitud de esta niña, pero no puedes ir con nosotros, es peligroso Olivia-Dijo Alastor Moody, el verdadero.

-Pero no es justo Moody, ya nada es seguro-Dije sacando un par de galletas de la alacena.

-Aun no formas parte de la Orden porque no tienes la mayoría de edad y tu padre no lo permite-Dijo Kingsley, otro miembro de la orden.

-Mi hermano murió a manos de ustedes saben quien, es normal que quiera ir a ayudar-Dije.

Todos me miraron tristes.

-Sirius no te permitió ir, y sin el permiso de tu papá no iras-Dijo Alastor Moody.

-Sirius es aburrido-Dije echándome en una silla.

-¡Te escuché!-Grito Sirius.

Toda la orden se fue para sacar a Harry de la casa de sus tíos, yo me quedé en la cocina.

-Olivia tienes que dormir un poco-Dijo el tío Lupin.

-No quiero-Dije cruzándome de brazos.

-Hija tienes que dormir-Dijo Sirius.

Los miré molesta mientras estaba sentada en la silla.

Sirius me tomó en brazos y me llevó por las escaleras hasta mi cuarto.

-Papá yo quería ir-Dije molesta mientras Sirius me arropaba.

-Se que querías ir, pero no me perdonaría que te pasara algo...Se que estás molesta, que quieres que todos tus amigos estén bien, la muerte de Cedric no será en vano, pero debes dejar que los adultos se encarguen-Dijo Sirius.

-¿Al menos me despertarás cuando Harry llegue?-Pregunte.

-Claro que si, pero nada de besos en mi presencia-Respondió Sirius.

-¡Papá!-Exclame riendo.

-¿Quieres que te lea un cuento?-Pregunto Sirius.

-No tengo cinco años-Respondí sonriendo.

-Se que no, pero no estuve cuando los tenías, vamos. Soy bueno contando historias-Dijo Sirius.

Sentí una felicidad enorme, mi padre Aidan jamás me había leído un libro cuando era pequeña.

-¿Cuál me vas a leer?-Pregunte mientras me acomodaba.

-Tu tío Lupin vio este el otro día y te lo trajo, se llama "La Cenicienta"-Respondió Sirius.

-¿Qué es la Cenicienta?-Pregunte.

-Una muchacha que conoce un príncipe, pero que debe volver a su casa a las 12 de la noche. Mas te vale que no sigas los pasos de esa muchacha-Respondió Sirius.

Me puse a reír, es lindo como trata siempre de hacerme sentir mejor, de crear recuerdos conmigo.

-¿Te lo leo?-Pregunto Sirius.

-Soy todo oídos papá-Respondí sonriendo.

Sirius tomó el libro entre sus manos y se acomodó junto a mi, mientras me hacía cariño en el pelo.

-"Erase una vez, una joven muy amable y servicial, llamada Cenicienta..."-Empezó a leer Sirius.

Pero no me di cuenta cuando me quedé profundamente dormida.