I'll be your hero [Harry James Potter]

-CLXIII-

Olivia.

Diciembre.

Queridos papá y mamá:
Todo está bien en Hogwarts, en serio no se preocupen por mi. Lamento no haberles enviado ningún regalo. Quejicus no nos deja salir nunca.

Los amo, no lo olviden por favor.
Feliz Navidad.

Guarde la carta dentro del sobre mientras me transformé en mi forma de animaga, corrí por los pasillos secretos que ya conocía, hasta que salí a Hogsmade, observé como venía un cartero, ya no están usando mucho las lechuzas, coloque la carta apenas paso por mi lado y regrese al castillo.

Mañana es vísperas de Navidad, 24 de Diciembre.

Camine hasta la Torre de Astronomía, aquella torre donde el profesor Dumbledore había sido asesinado y a mi me habían atacado.

Toque la cicatriz que cruzaba mi mejilla con dolor, aún puedo recordar como me atacaron, como perdí el conocimiento, jamás pensé todo esto pasaría.

Seguía doliendo como el primer día, y supongo que me duele más porque Harry no estaba conmigo.

Mis amigos trataban de animarme, de subir mi ánimo. Pero nada de eso resultaba al final del día, cuando regresaba a mi cuarto sola, sin nadie.

Sin mi Harry durmiendo conmigo.

Sigo despertando por las mañanas pensando que él estaba durmiendo plácidamente a mi lado, o que me despertara a la mitad de la noche por esas pesadillas horribles que no lo dejaban dormir, que lo atormentaban.

Pensé en el, durmiendo en cualquier parte del mundo, quizás con frío incluso. Despertando a la mitad de la noche por una pesadilla, y no estando yo a su lado para consolarlo.

"Mis pesadillas son sobre perderte."

Las mías también Harry.

Me senté un poco cerca de la baranda de la Torre. Abrí el libro que el profesor Snape me regaló, jamás le digo que no a un libro. Y la verdad no tengo ánimos de leer ninguno de Crepúsculo, me siento como Bella en Luna Nueva, cuando Edward se va lejos.

¿Soy capaz de lanzarme de la Torre de Astronomía solo para que Harry vuelva?, no, de ninguna manera. No le daría ese dolor jamás.

Pero vaya que lo extraño, que lo necesito. Jamás me había sentido de esta manera por un hombre, tal vez por Cedric pero era totalmente diferente, dos casos aislados de ser parecidos. Ced era como mi hermano y esta muerto.

Harry está vivo, por alguna parte del mundo, pero vivo a fin de cuentas. Siento que eso es peor, que él puede volver pero no debe.

Y yo quiero que vuelva, quiero que vuelva a mi, necesito a mi testarudo con instintos suicida d conmigo. No paro de recordar nuestra despedida en la boda, si hubiese sabido que esa era la última vez que nos íbamos a ver, le hubieses dicho más cosas.

Pero él hubiera no existe.

"Para mí no eres todavía más que un muchachito semejante a cien mil muchachitos. Y no te necesito. Y tú tampoco me necesitas. No soy para ti más que un zorro semejante a cien mil zorros. Pero, si me domésticas, tendremos necesidad el uno del otro. Serás para mí único en el mundo. Seré para ti único en el mundo..."