Capítulo 8

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—Que tengas un buen día, cariño

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—Que tengas un buen día, cariño.

—Gracias, tú igual.

Me bajé del auto después de despedirme de papá y Max.

Tragué con dureza, me puse la mochila y caminé hacia la entrada. Jamás en mi vida había estado tan nerviosa como hoy.

Definitivamente no estoy preparada para esto. ¿Qué voy a estar haciendo yo con los Kingwell y sus amigos?

Pasaré de ser la chica invisible, a la "amiga" de Jayden. Lo que probablemente me dé un poco de popularidad.

Y lo que menos me interesa es ser popular

—¡Sabine!

Dejé de respirar al segundo después de que escuché a Jayden llamándome.

Sonreí con falsedad al ver a los Kingwell junto a dos chicos más apoyados en las taquillas.

Caminé hacia allí con las piernas temblorosas mientras le pedía a todos los dioses que por favor no me pasara nada vergonzoso frente a ellos.

¿Tendré la nariz limpia?

Ay, sería capaz de matarme si llegara a tener un moco...

—¿Qué tal? ¿Preparada para un nuevo día en la cárcel? —Jayden me miró con una sonrisa tranquilizadora. Asentí sin saber qué decir—. Ellos son Bryant y Matt —dijo mientras apuntaba a los chicos que me miraban extrañados.

Lo sé, los amigos de Marlon

—Un gusto. Me llamo Sabine —me doy unas palmaditas en la espalda mentales después de hablar, ya que soné bastante segura.

—¿Eres nueva?

Quise poner los ojos en blanco al escuchar la pregunta de Bryant.

—Lleva años en la escuela —Marlon contestó mientras me miraba con una pequeña sonrisa.

¿Hola? ¡Me está sonriendo!

—Bastantes, la verdad —reí nerviosa.

—Lo siento, no te conocía —Bryant hace una mueca incómodo.

—Tranquilo, no muchos me conocen —hago un movimiento con la mano para restarle importancia—. Me gusta pasar desapercibida.

—Y no sé por qué lo haces —miro a Jayden con las cejas alzadas—. La verdad es que eres bastante agradable —dice encogiéndose de hombros. Pero tengo la leve sospecha de que lo dice irónicamente.

—Lo que pasa es que soy muy poco sociable. Me cuesta entablar una conversación con alguien que no sean mis amigos —me aferro con fuerza a las tiras de mi mochila al sentir la mirada de Marlon fija en mí—. De hecho, no sé cómo estoy hablando con ustedes ahora.

—Bueno, al parecer te caímos bien —Le doy una sonrisa a Matt—. ¿En qué año vas?

—Voy en tercero.

Atrapada en el Encanto KingwellDonde viven las historias. Descúbrelo ahora