7- Nuevo trío dinámico.

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Capítulo 7: Nuevo trío dinámico.

Lunes primero de septiembre: Mabel Hanson.

Las vacaciones habían llegado a su fin, lo que significaba ir al instituto, la verdad ni ganas tenía de levantarme, pero lo hice, debía hacerlo.

El sábado, mis padres tuvieron que ir de emergencia a la empresa, ya que intentaron hackear el sistema, por ese motivo no hicimos nada para celebrar mi cumpleaños.

Ya me había duchado, vestido con el uniforme correspondiente, y dado color a mi rostro con solo un poco de maquillaje, necesitaba tapar las ojeras, pasé toda la noche ansiosa, no pude dormir, y en la mañana se me quitó la emoción de ir al colegio. Ya estaba lista, con todas las cosas en mi bolso (cosas que había comprado con Bruno).

La voz de Mariano retumbó en mi habitación: —Chicas ya estoy listo, las espero en la cochera.

Apresurada salí de mi habitación, saludé a Mariana, a quien su iris azul le brillaba con entusiasmo. Cerramos la casa y fuimos a la cochera.

Ambas saludamos a Mariano y nos adentramos al auto, como siempre mi hermana puso música

I know I'm acting a bit crazy strung out, a little bit hazy hand over heart, i'm praying that i'm gonna make it out alive. —"The heart wants what it wants" de Selena Gómez resonaba por todo el auto.

Mi hermano frenó de golpe por el tráfico que había. Íbamos con los vidrios abajo ya que no era necesario encender el aire acondicionado, había brisa, de esa que es relativamente normal en la mañana.

Yo iba cantando en voz baja, y una motocicleta se estacionó justo a mi lateral, llevaba puesto el uniforme del colegio, seguro era alguien conocido. Por el casco no lograba ubicar a la persona, pero al hablar rápidamente supe de quien se trataba.

—Buenos días, Miller —saludó Eric.

—Buenos días, motociclista —respondí burlona.

El chico arrancó y se fue alejando. No lo veía desde el viernes, pero durante el fin de semana me había llamado.

—¡Hey! ¿Qué fue eso hermanita? —exclamó Mariana entre risas.

—Déjala en paz, él solo se detuvo a saludar —gruñó mi hermano.

Mariana siguió riendo, y yo opté por hacerme la que no entendió.

A unas cuadras del instituto, Mariano rompió el silencio.

—Mabel, te quería comentar algo —inició hablando con algo de vergüenza; —Sabes que ayer en la noche, Matteo me envió un mensaje, —hizo una pausa. —Preguntándome si podía invitarte a salir, así que si te pregunta, puedes ir sin problema, solo no llegues tarde.

—¿De acuerdo? —Me limité a decir.

¿Qué Matteo, qué? Mi hermano me está diciendo que salga con su amigo, así como si nada. ¿Ya tengo el permiso?

—Y llegamos —anunció él.

Mariano se estacionó, y me despedí mientras bajaba del auto: —Nos vemos más tarde, los amo.

—Te amamos más —agregó Mariana.

—Que sea un excelente día hermanita —dijo Mariano.

Caminé hasta mi salón de clases, aún no había nadie, bueno eso era lo que creía, estaban una chica y un chico sentados al fondo del salón. Ellos se dieron cuenta de mi presencia y me hicieron una seña con la mano, para que me acercara.

Siendo Adolescentes © [SIENDO #1| Completa✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora