Siendo Adolescentes © [SIENDO #1| Completa✓]

15- ¿A merced de quién?

Capítulo 15: ¿A merced de quién?

Eric Makri.

La profesora de literatura se tuvo que marchar temprano, por ese motivo salí temprano del instituto. Fui por mi motocicleta al estacionamiento y tomé rumbo a casa de mi tía.

Cuando llegue, estaban mis padres sentados en el sillón.

—¿Qué tal te fue? —Me preguntó mi padre. Y mamá se levantó a darme un abrazo.

—Bien, gracias. ¿Qué hacen tan temprano por aquí? —Dejé mi mochila en el sofá.

—Los socios de tu padre viven aquí en la residencia —sonrió mamá —Y te queremos pedir el favor de que estés listo a las siete de la noche, para ir a cenar a casa de ellos.

—Hijo, por favor, es una buena oportunidad de hacer negocios acá en la ciudad, —se levantó y me dio una palmada en el brazo. —De seguro conoces a sus hijos, los Hanson.

Así que los Hanson... La sorpresa que se llevará Miller esta noche.

Si aún no lo sabe.

—Sí, yo estudio con sus hijos —afirmé.

—Entonces supongo que será una cena de tu agrado —papá se dirigía a la cocina —Y otro favor, usa el traje que dejé en tu habitación.

—Lo que tú digas, papá.

—Me alegra que ya estás madurando —insinuó mamá.

Sabía a lo que se refería, antes solía quejarme porque no quería ir a ninguna cena. Pero esta vez es diferente, Miller estará allí.

Mi tía y mi papá pusieron la mesa, e iniciamos a comer. Luego subí a mí habitación para recostarme un rato.

Al despertarme me di cuenta de que eran las seis de la tarde. Así que me apresuré y tomé una ducha, me vestí con el traje color vino tinto, dejé mi cabello despeinado, finalicé mi atuendo colocándome zapatos negros formales y un reloj en mi muñeca izquierda, que marcaba las seis y cincuenta.

Bajé a la sala, y allí estaban mis padres esperándome.

—Subamos al auto —ordenó mi padre.

Caminamos al auto, subimos y mi padre arrancó.

No tardamos ni cinco minutos en llegar, y ella no tardó ni cinco segundos en dejarme encantado con su belleza.

—Buenas noches —balbuceo. —Sigan, los estábamos esperando.

Mis padres saludaron a Mabel y entraron.

—Buenas noches, Miller.

Mabel Hanson.

—Buenas noches, Eric —recibí su mano.

Al entrar la familia de Eric, todos nos saludamos e iniciaron las presentaciones.

—Familia, Adriano Makri, junto a su esposa Elena, y su hijo Eric —informó mi padre —Ella es mi esposa Jade, mis hijas Mariana y Mabel, tengo un hijo que se llama Mariano pero no sé por qué no llega —explicó apenado.

—Gracias Jacob, un gusto en conocerlas —se dirigió a mi mamá, mi hermana y a mí —Así son los chicos de ahora, seguro debe estar por llegar, no te preocupes.

No teníamos idea de por qué Mariano no había llegado, sinceramente yo estaba preocupada, no contestaba llamadas, ni mensajes, y luego de unas horas ni le llegaban.

—Es un gusto conocerlos a todos —añadió mi madre —Podemos pasar a la cocina, si gustan.

—Trajimos una botella de vino —comentó la mamá de Eric.