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Recuerden que cada autor/a tiene su propia interpretación del Omegaverse. Espero que les guste mi universo <3
W.
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Mew
—Buenos días, Su Alteza—La mucama se acercó a la gran cama donde Mew se encontraba envuelto en sábanas—¿Tuvo usted una buena noche?—preguntó.
Mew resopló. Qué aroma tan empalagoso, pensó. Sin embargo, por decencia y diplomacia, el chico estaba obligado a responder.
—En efecto—replicó—¿Puedo hacerle una pregunta, señorita?
La chica de ojos saltones, algo pequeña pero delgada y muy sonrojada, asintió enérgicamente con la cabeza: —¡Claro que sí, Su Alteza! ¡Lo que usted quiera!
El príncipe separó su cuerpo de las cobijas y posó sus pies en el suelo helado. Ladeando su cabeza, inspiró nuevamente el aroma a chicle y frambuesa que emanaba de la omega frente a sí.
—¿No es política del Palacio tomar inhibidores al trabajar? Huelo perfectamente su aroma—preguntó Mew, aún cuando ya sabía la respuesta.
La chica palideció. —S-si, Su Alteza. D-debí olvidarlo.
Arqueando una ceja, Mew prosiguió:
—No lo creo—Una vez de pie, y acercándose a la diminuta chica, el royal sonrió satisfecho y dijo:—¿Me querías seducir?
—¿Q-qué dice, Su Alteza?
—¿Creíste que tu aroma me resultaría apetecible?
—Y-yo no...
—Apuesto a que si—dijo el chico inhalando nuevamente el olor dulzón que, ahora, tenía un tinte de añejo por el miedo. Mew postró su rostro cerca de la oreja de la omega y musitó: —Largate antes de que te mande a apresar por trato inapropiado a la realeza.
Tragando en seco, la omega salió disparada de la habitación sin decirle una palabra al príncipe. Eso creí, pensó. Suspirando, el chico se acercó al teléfono instalado que tenía en la habitación y presionó la tecla dos: la cocina.
—Si, necesito el desayuno. No, no lo han traído. ¡Ah! Mildred es su nombre. ¿Sabías que Mildred no tomó sus inhibidores? ¿No eres tú quien hace el control sobre esto?—Tras varios segundos de explicaciones, Mew bostezó y dijo—No es necesario. Solo traigan mi comida.
Y colgó.
Otra vez aquí.
Mirándo a su alrededor, Mew se encontró con las mismas paredes de hace seis años, la última vez que el joven príncipe había estado en su natal Bangkok. Desde los 24, el chico había decidido emprender un viaje de autodescubrimiento en el exterior, siendo la idea de formar futuras alianzas con reinos vecinos la excusa perfecta para escapar de la prisión que muchos llamaban Palacio.
No era un hogar para él. Nunca lo fue.
Pese a haber viajado a varios lugares, su educación como futuro monarca de Tailandia fue impartida casi como si estuviera en casa. No pude escapar de mi destino, pensó. Pero no se reprochaba. A él no le disgustaba la idea de ser Rey, pues amaba a su pueblo: lo que el chico detestaba eran las imposiciones.
—Quizás cuando sea Rey ya no tendré que escuchar órdenes—Se dijo a sí mismo para convencerse de volver a Tailandia e iniciar los verdaderos preparativos para acceder al trono.
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The Omega's Power: A MewGulf AU [TERMINADA]
FanfictionEl Rey Alfa de Tailandia había anunciado que todas las omegas casaderas, vírgenes y sin mordida debían presentarse cual ganado al Palacio Real para el Baile Anual de los Nobles en Bangkok. ¿La razón? Podrían convertirse en la próxima princesa del re...