The Omega's Power: A MewGulf AU [TERMINADA]

Capítulo 23

N/A:

Espero que este capítulo laaargoo les guste. No olviden que mañana tenemos LIVE DE MEWGULF ASJDBAKDJBJKDB 

W.

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Mew

Jodida mierda.

La penetrante mirada de su padre hizo que el príncipe tragara en seco y apretara con más fuerza la mano de su omega. En aquel momento, Gulf no pronunció palabra alguna pero su expresión corporal era más que evidente: estaba nervioso. Mew no lo culpaba. No podía hacerlo aún si quisiera, pues ni la situación ni el ambiente eran los más cómodos posibles.

—Adelante, la Beta Yaya los está esperando—habló el Rey en forma tajante. Tras una corta reverencia, ambos chicos ingresaron al despacho donde su padre los invitó a tomar asiento.

En ese lugar se encontraba una esbelta Beta que, según el monarca, les otorgaría información ecesaria para iniciar con los preparativos de su futura boda.

—Saludos, Su Alteza, Su Excelencia—dijo la chica reverenciando al alfa y el omega. —Su Majestad me ha ordenado presentarle a Su Excelencia Gulf, Prometido Real, el listado de las obligaciones que le corresponde llevar a cabo durante la etapa de preparación para convertirse en parte de la Familia Real.

>>> Su Excelencia tendrá a su disposición la corte de doncellas, todas ellas Betas, para la preparación del banquete de Compromiso y la Boda Real, además de su entrenamiento como futuro...eh.

—Rey consorte—interrumpió Mew al notar cómo la Beta había detenido su charla.

El Rey aclaró su garganta y, con un asentimiento de cabeza, indicó a Yaya que continuara con su discurso: —Eso, Rey consorte y Luna del Reino de Tailandia.

—¿Entre- entrenamiento?—preguntó Gulf vacilante. Mew apretó su mano. —¿Sobre qué debo entrenarme?

—¡Demasiados asuntos, Su Excelencia!—exclamó la Beta cuyo tono de voz oscilaba entre la ofensa y la sorpresa. —Estoy seguro que Su Excelencia sabe cuales son sus obligaciones como omega, pero aquí estamos hablando de la Familia Real.

>>>Debe aprender a manejar la servidumbre del Castillo Madee Preecha, encargarse del menú semanal y ordenar las compras mensuales. Así mismo, Su Excelencia será el responsable de los banquetes venideros y, en ese sentido, su obligación es aprender el arte de organizarlos.

Tras breves instantes donde ninguno de los congregados mencionó una sola palabra, la Beta suspiró:

—¿Alguna otra pregunta, Su Excelencia?—preguntó Yaya.

Su tono de voz no era mordaz. Sin embargo, a juzgar por la postura un tanto retraída de la chica, sabía que esta preferiría estar en otro lugar y no cerca de su omega. Dentro suyo, Mew tuvo que recitar un mantra para calmar a Supsid, quien amenazaba con salir a flote y arrancarle la cabeza a la Beta.

Control, Suppasit. Control.

—N-no—dijo Gulf.

Esa fue la única interrupción de toda la jornada, pues tras aquella conversación la Beta Yaya decidió dar una especie de clase magistral sobre las obligaciones de las omegas y su rol dentro de la Familia Real. Mew quería desaparecer y llevarse consigo a Gulf, pues no soportaba tal discurso donde se reducía la participación del chico a ser meramente un trofeo del Reino.

—Debe siempre vestir siguiendo las reglas del Reino, es decir, conservadoramente. Nada de trajes reveladores ni nada que vaya en contra de los valores del Palacio. Colores demasiado llamativos no son permitidos, ni mucho menos cortes extravagantes.