The Omega's Power: A MewGulf AU [TERMINADA]

Capítulo 26

Hola, aquí W.

Espero que les guste el capítulo.

Les cuento que ya vamos a mitad de camino y la próxima semana ya tendremos el Compromiso Real (que ni tan compromiso es porque ya son prometidos xd) así que empezaremos a descubrir cosas interesantes *-*

¡Un beso!

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Gulf

Tres días antes del Compromiso Real

—¿Lo tienes, verdad?

La voz de Mild se escuchaba lejana para el omega quien, convertido en lobo, trataba de concentrarse. Era la misma rutina que habían repetido todos los días sin descanso desde hacía un mes: desayunar, despedirse de Mew, correr hacia los bosques aledaños e iniciar la clase con Mild para aprender, de una buena vez, a controlar su poder.

Sus clases pasaron a ser intensivas una vez Mew le notificó la decisión de Los Nobles sobre la fecha de su compromiso y posterior Boda. Gulf estaba decidido a aprender a manejar aquel don que la Diosa Luna le había otorgado antes de poder asumir sus responsabilidades como royal, así que le suplicó a Mild extender el horario de entrenamiento para lograr su cometido.

El chico no podía mentir: gracias a aquello había notado un avance en su desempeño, puesto que ahora podía divisar su poder como una especie de humo espeso de color magenta que se extendía hacia la persona a la cual quería provocarle dolor. Esa ayuda visual le hacía más fácil su trabajo.

—De acuerdo, Gulf. Vamos a intentarlo, ¿estás listo?

Su lobo Gup resopló en respuesta.

De inmediato aquel humo magenta empezó a brotar del cuerpo del lobo, deslizándose vigorosamente en dirección al cuerpo de Mild quien arrugaba su rostro. Una pequeña dosis de aquel vapor fue suficiente para que el Beta fuera derribado al suelo y empezara a gimotear. Pese a que Gulf no disfrutaba de proporcionar dolor a las personas, en el fondo sabía que sus instintos se sentían regocijados al saber que podían protegerse gracias al poder.

Sin embargo, un fuerte pinchazo en su cabeza hizo que su concentración se fuera a pique.

Ugh.

Aquel dolor punzante había sido una constante durante aquel mes. No importaba que tan concentrado se encontraba el chico, o en qué actividad se hallara, su cabeza dolía hasta el punto en que no podía concentrarse en continuar con su cometido. Era verdaderamente fastidioso para el omega quien trataba de manejar su horario entre sus clases con Mild, la planeación de su boda con Mew y su entrenamiento como futuro miembro de la Familia Real.

—Podemos parar aquí—comentó Mild.

Gulf negó con la cabeza. El chico estaba decidido a continuar: —Me convertiré de nuevo, Phi. Lo haremos desde el inicio.

—Gulf...—La voz de Mild denotaba preocupación y el rostro del Beta se encontraba contraído levemente.

—Estoy bien, Phi—dijo Gulf, aún cuando trataba de disimular lo mucho que le afectaba aquella molestia en su cabeza.

—¿Me lo juras?—preguntó Mild algo escéptico.

—Completamente—dijo Gulf sin dudar un solo instante.