The Omega's Power: A MewGulf AU [TERMINADA]

Capítulo 9

N/A:

¿Ya escucharon Summer Fireworks? ¿Están haciendo streaming? 

Aquí un regalito <3

W.

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Gulf

No encajo aquí. Ese fue el primer pensamiento que vino a su cabeza cuando observó el elegante salón repleto de Nobles y omega delicadas y pequeñas. Cuando ingresó todo el mundo volteó a verlo pero eso no fue sorpresa para el chico, pues Gulf iba tomado del antebrazo del príncipe Mew Suppasit Jongcheveevat. Conforme fueron avanzando, los murmullos crecían considerablemente y la música clásica que sonaba de fondo se escuchaba cada vez más lejana.

Una vez llegaron al encuentro con el Rey, Gulf hizo una reverencia: —Su Majestad.

El Rey asintió sin dejar de observar al menor. El omega ya había visto esa expresión antes en el rostro del monarca tailandés cuando se reunieron por primera vez, -más temprano-, para su presentación formal. En realidad, era la misma que todos le habían dedicado desde que arribó a la capital: disgusto mezclado con temor.

Todos menos Mew, pensó.

—Padre—murmuró Mew reverenciando de igual forma.

—Bien, no perdamos más tiempo. Vamos.

Los chicos siguieron al mayor quienes, a paso lento, se dirigían al sitio más alto de los dos niveles de aquel Ala. Subiendo por las escaleras, Gulf sentía que su corazón quería salirse del pecho pero la mano firme de su alfa lo mantuvo calmado.

¿Qué sucederá? Era la pregunta que se hacía, pues si bien había escuchado la conversación que el Rey y Mew habían tenido más temprano, aún se sentía perdido.

Siempre lo estás, se regañó a sí mismo.

Cuando el Rey aclaró su garganta, un miembro de la guardia habló con voz firme:

—¡Su atención por favor!—exclamó. —Su Majestad el Rey Bunkit Sangwit Jongcheevevat II de Tailandia se dirigirá ante ustedes, los honorables Nobles y demás invitados al banquete. El Palacio solicita al auditorio estar en completo silencio para escuchar la alocución real.

En ese instante, la mano de Mew tomó la suya y la entrelazó.

—¿Estás bien, cariño?—murmuró el príncipe. Fue allí que notó cómo su cuerpo se sacudía levemente, temblando como si estuviera en peligro. —No hay nada que temer.

—Honorables Nobles e invitados—inició Su Majestad. El público, que se encontraba en completo silencio, tenía los ojos puestos en el monarca. —Me complace estar aquí una vez más, como cada año, celebrando uno de los rituales más importantes de nuestro Reino: el banquete a sus Nobles. Como es tradición, el Rey debe presidir dicha celebración en el Palacio Real e inaugurar la misma con el discurso del Jefe de la tribu.

>>>Este año es, sin duda, una ocasión diferente. En esta fecha tan especial contamos con la presencia de mi hijo Su Alteza Real el príncipe Suppasit Jongcheveevat. Así que quiero dedicar el discurso a él. Para nadie es un secreto la razón por la que, tanto en el baile anual como en este banquete contamos presencia de plebeyos, así que me iré sin rodeos.

>>>Mi hijo ha escogido finalmente a su omega.

No pasó ni un solo segundo cuando en todo el auditorio se empezaron a escuchar jadeos, chillidos y unos cortos sollozos. La respiración de Gulf se hizo pesada mientras Mew volvía a acariciar el dorso de su mano.