Home. [Shawmila]

51.

[N/A: Hola! Perdónenme por desaparecer de nuevo, espero que aún hayan lectoras por aquí :(]

-Sí, estoy aquí. -dijo mirando insegura todo el lugar. Se le hacía tan extraño.

-Es la dirección correcta, Mila. -repitió Roger, carraspeando un poco.- Entra para que puedan arreglarte.

Terminaron de conversar y la castaña se encogió de hombros.

Su compañía la había mandado ahí, no debe ser peligroso.

¿O sí?

Iba respondiendo a sus amigos mientras subía una foto de la sesión que tuvo ayer con GUESS a su Instagram para tratar de mantener activas sus redes sociales ya que no les estaba prestando mucha atención últimamente. Es que ha estado tan ajetreada... Su team le propuso hacerse cargo de sus redes sociales pero la castaña se negó. Era la única manera de sentirse cercana a las personas que la admiraban... no iba a cambiar eso, así le cueste un poco hacerse cargo de todo.

Observó todo el lugar curiosa mientras iba avanzando.

Era un lugar muy bonito, parecía sacado de un cuento de hadas o de una película de princesas de Disney. Se parecía mucho al reino de Corona, de donde es princesa Rapunzel, su película de princesas favoritas. Sonrió.

Le encanta ese lugar, ojalá su compañía decida hacer más sesiones de fotos ahí.

-¡Camila! -la llamó Sofía Carson, llegando hasta ella sonriente, y un poco emocionada. La castaña la saludó con una sonrisa.- ¡Qué bueno que ya llegaste! Te estábamos esperando.

-¿Sólo faltaba yo? -preguntó la chica, un poco confundida. Había llegado temprano.

-Eh... sí. Adelantaron un poco la sesión. Vamos. 

Siguieron avanzando hasta que llegaron a una especie de sala donde los maquilladores habían montado su camerino y estaban arreglando a las demás modelos. Saludó a todos y se dirigió a su lugar donde estaba la silla con su nombre en el espaldar.

-Este lugar es precioso. -sonrió Camila, mirando como hasta esa sala tenía la misma temática ambiental de Rapunzel.- Se parece mucho a donde vivía Rapunzel. -dijo como una niña pequeña. Sofía asintió varias veces.

-Lo mismo pensé. -dijo mirando el lugar. 

Las maquilladoras comenzaron a hacer su trabajo en su rostro mientras los estilistas comenzaban a peinarla. Sofía seguía conversando con Camila ya que ella ya estaba preparada. 

Unos minutos después abrió los ojos y levantó las cejas al verse en el espejo.

Wow.

-Qué... Qué bonito. - susurró mirando su maquillaje, asombrada. La habían maquillado realmente bien y le emocionaba. 

Se sentía bonita.

Su cabello lo habían dejado cayendo por sus hombros en ondas, viéndose realmente bien.

-Te ves muy linda. -exclamó Sofía, dándole una vuelta sobre sí misma, a lo que Camila soltó una pequeña risa.- Ahora ve a cambiarte. 

La chica se dirigió a uno de los vestidores con su nombre en la puerta y entró observando el vestuario que le correspondía ese día.

Sonrió mirando el vestido color lila que colgaba de un gancho. Tenía detalles de bordados muy lindos y la falda le llegaba hasta arriba de la rodilla, por lo que era corto pero tenía vuelo, así que no era pegado, salvo en la parte de la cintura y el pecho, pero se amoldaría perfectamente.

Le encantaba. Era su tipo de vestidos favoritos.

Procedió a cambiarse y a colocarse los zapatos altos color dorado que habían colocado a su costado, también muy bonitos.