3.

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-Y aquí está la piscina y el parque. -dijo Camila mientras seguía caminando con el mismo entusiasmo de antes. Shawn asintió mientras miraba todo y la miraba a ella.

-Tienes una casa muy grande. -dijo el chico contemplando la gran piscina dentro de la casa, asimismo el gran parque que se encontraba al lado. Todo estaba dentro de la casa de la castaña, parecía como una mini ciudad.

-Lástima que la mayoría del tiempo se encuentre sola. -dijo encongiéndose de hombros mientras se dirigía a los columpios y se sentaba.

-¿Sola? ¿A qué te refieres? -dijo intentando no sonar entrometido.

-Mis padres viajan mucho y yo no estoy tanto aquí, seguro cuando vuelvan de la reunión es porque quieren que se vayan a Europa otra vez para supervisar las empresas. -dijo mientras se paseaba.

-¿Por cuánto tiempo? -preguntó Shawn.

-Por casi 6 meses. -dijo suspirando.- De hecho, desde que nací, ellos dejan que estudiantes se queden aquí para que, cuando ellos se vayan, yo tenga compañía. -dijo sonriendo.- Antes se había quedado aquí una chica que estudiaba teatro en la Brissol University, pero ella me daba miedo. Siempre se ponía a gritar a media noche y parecía que le estuviera pasando algo. Pero no, sólo estaba actuando. -dijo encongiéndose de hombros.

Shawn asintió mientras se sentaba en el otro columpio y también se paseaba.

-Te prometo que yo no gritaré a media noche. -dijo alzando su mano derecha en forma de juramento. Camila rió.

-Más te vale.

(...)

-Bueno, creo que ya te enseñé toda la casa, ¿no? -dijo bostezando.

-Sí, lo hiciste pero igual me perderé. -dijo encongiéndose de hombros.

-Nah, con práctica no te perderás. -dijo mientras se dirigía a la cocina y sacaba una manzana de la cesta de frutas.- Hay pizza en la refrigeradora, ¿cenamos eso? -preguntó Camila.- ¿O prefieres llamar a delivery de otra cosa? -dijo mientras se tallaba los ojos y luego mordía la manzana.

-Creo que mejor cenamos la pizza, sino el delivery se demorará mucho y te dormirás.- dijo Shawn y la castaña asintió mientras se dirigía a la refrigeradora y sacaba la caja de pizza que sus padres le habían comprado.

-Muy bien, vamos al comedor. -dijo mientras sostenía la pizza con una mano y la manzana con la otra mano.

Shawn la siguió de cerca pero la detuvo nada más avanzar 4 pasos.

-¿No calentarás eso? -preguntó señalando la pizza. Camila rió levemente y le entregó la pizza al castaño.

-Lo siento, estoy medio dormida ya. -dijo mientras esperaba que Shawn caliente la pizza.

(...)

-¿Camila? Hija, debemos hablar contigo.- dijo Alejandro entrando a la habitación de la castaña, seguido de Sinu.

La castaña se removió en su cama, aún con los ojos cerrados y se tapó con las sábanas. Gruñó.

-Hija, levantate, es importante. -dijo Sinu, moviendo ligeramente a la castaña. Camila bufó mientras abría los ojos.

-¿Qué hora es? -preguntó con la voz adormilada.

-Son las 5 de la mañana, hace 3 horas llegamos, pero debemos salir nuevamente.- dijo Sinu mientras la castaña se sentaba en su cama.

-¿Salir? -preguntó confundida al ver las maletas detrás de ambos.

-Hija... hubo un problema en la empresa de Europa y nos han dicho que vayamos. -dijo Alejandro, sentándose en la cama de Camila. La castaña bostezó y se talló los ojos.

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