Home. [Shawmila]

4.

-¡Aquí es! -exclamó la castaña mientras observaba el desierto y las cámaras a lo lejos.

-Bueno casi una hora manejando no quiere decir que haya estado muy lejos. -dijo Shawn, sarcástico.

-Estoy casi 2 horas tarde, debo irme. -dijo Camila agarrando su bolso y su celular rápidamente, asimismo abrió la puerta del auto cómo pudo y salió.- ¡Te llamo si esque me puedes recoger! -dijo antes de cerrar la puerta y dirigirse corriendo a las luces y cámaras.

-Pero ni siquiera tienes mi número.

(...)

-¡Ya sé que llegué tarde! Pero me quedé dormida. -dijo Camila mientras entraba corriendo al set donde serían las fotos de ese día. Un desierto.

Se dirigió a donde estaban todos junto con las cámaras y las luces, esperandola de brazos cruzados.

-Son casi las 9, Camila. -dijo una asistente de cámaras, mirándola. Camila asintió nerviosa.

-Lo sé, lo sé, pero este lugar está muy lejos de mi casa. ¡De la ciudad! Hubo tráfico y no podía llegar antes. -dijo mientras recuperaba el aire perdido poniendo sus manos en sus rodillas, de tanto que había corrido.

-¿Estás bien? -preguntó una voz masculina que conocía muy bien, mientras se arrodillaba en frente suyo a su tamaño y la miraba a los ojos con una expresión de preocupado, posando una mano en la mejilla de la castaña.

Alessandro.

Lo miró a los ojos y se paró recta, ignorandolo.

-Sí, estoy bien. -dijo fría, mientras miraba a los demás, evitando al chico.

Alessandro suspiró y se paró de la arena en donde se había arrodillado para ver a la castaña y asegurarse de que esté bien.

-Bien, en tu camerino está tu ropa de hoy. Ve a cambiarte por favor. -dijo el supervisor de la campaña de Guess donde estaban Alessandro y ella.

La castaña asintió y, más calmada se dirigió a los vestuarios mientras respondía algunos mensajes de las redes sociales.

Típico de ella.

(...)

-Te queda perfecto. -le dijo la estilista mientras la maquillaba y otra chica la peinaba.

-Muchas gracias. -sonrió Camila mientras seguía tecleando rápidamente en su celular.

Levantó la vista de su celular por un momento y pudo ver, a lo lejos, cómo le tomaban las fotos a su novio y cómo él se desenvolvía realmente bien frente la cámara.

Incluso mejor que ella.

Se le veía muy guapo con esa ropa, y las poses que hacía le hacían ver realmente mejor.

Se le veía sexymente bien.

De hecho se le veía más maduro, mayor y perfecto. Bueno, sólo tenía 18 años, así que mayor que ella, sí era, por 2 años.

Pero aún así lo quería muchísimo, a pesar de las peleas que tenían.

La castaña suspiró enamorada mientras volvía a bajar la mirada a su celular y dejaban de peinarla.

Le estaban haciendo una especie de media cola de caballo y su maquillaje era como antiguo.

Le gustaba cómo estaba quedando, siempre era en torno al pasado y, al ser en blanco y negro, no captaba el tiempo y nunca pasaba la magia de dichas fotos.

-Ya estás lista. -le dijo la estilista haciendo una pequeña línea con delineador sobre sus ojos y la castaña asintió mientras se paraba y se observaba en el espejo, mirando si en su ropa de hoy todo estaba en su lugar.