Había sangre salpicada en el escritorio, piso y los vidrios. Cada uno se golpeaba, parecían estar en un ring. ¿Esto acabaría? Calum dio el último golpe y tomo a Kang de la playera para tirarlo encima del escritorio haciendo caer todos los papeles que habían ahí.
-Basta, basta. Calum déjalo-
Él giró a verme y pude notar un rasguño en su rostro, y aquella escena de la violación apareció inmediatamente frente a mí. Tenía a los dos, a los dos en frente mío. Me apresuraba a ver la mano de Calum para ver si podía identificar la mordida que le dejé a la persona que me violó. Solo pude ver costra.
Kang pateo el abdomen de Calum, quitándolo de encima suyo, y haciéndolo impactar con la pared. Rodrigo gimió de dolor y Kang aprovechó para golpearlo nuevamente.
-Usted no puede pa... ¿Pero que es esto?-
Exclamó la secretaria al entrar a la oficina. Giré a verla y dije:
-Llama a seguridad-
Exclamé, ella asintió y rápidamente salió. Me acerqué a ambos, mientras gritaba para pararlos. No era la primera vez que se peleaban, aunque no sabía cómo separarlos.
-Basta, Kang. Por favor-
-ERES UN HIJO DE PERRA. TE METISTE CON MI MUJER-
-QUE TU NO LE DES LO QUE QUIERA NO ES MI CULPA-
-TE MATARE-
Ladeó la cabeza, molesto mientras sus ojos delataban la furia que este llevaba. Rápidamente me puse en su delante y se contuvo de golpear a Calum. Podía sentir la respiración agitada de Calumen mi cuello. Dios, estaba sangrando.
-Basta, por favor...-
-TU... EL...-
-Nada de eso pasó-
-La foto...-
-No... no sé, yo no recuerdo eso-
-Yo si-
Rio Calum, yo solo giré y patee sus pelotas. Él se tiró al suelo adolorido.
-ERES UN IMBECIL-
-Me las pagaras, _____-
-Vámonos, vendrá seguridad-
Dije ignorando el comentario de Calum. Kang tan solo negó, para luego salir corriendo. Salí detrás de él, pero él ya estaba dentro del ascensor. Las puertas se cerraron y del ascensor de al lado salía la secretaria, los de seguridad y... mi padre ¡Mierda! Se supone que debo estar en el campus. Rápidamente cogí unos folders del escritorio de la muchacha y traté de tapar mi rostro mientras me dirigía al ascensor. Al entrar presioné el botón el cual me llevaría al primerpiso y solté un suspiro de alivio.
***
-¿Podrías dignarte a abrir la puerta?-
-¿Qué es lo que quieres?-
-Explicarte-
-¿Explicarme? ¿Explicarme qué? No somos nada-
-Quiero aclararte lo de la foto-
Dije, la puerta se abrió y entré. Me quedé parada, él tenía un botiquín en el sofá. Por lo visto estaba limpiando sus heridas. Un ruido se escuchó, era un vaso romperse o eso supongo. Hice una mueca, alguien más estaba aquí.
-Lo siento, lo siento... soy una... ¿Qué hace esta perra aquí?-
-¿Samantha?-pregunté-
-¿Qué haces aquí? ¿No te basto con hacerlo pelear con ese imbécil?-
-¿Hacerlo pelear? ¿De qué hablas? Yo no lo obligué a nada-
-Como siempre haciéndote la víctima ¿No?-
-¿Podría alguien explicarme que está pasando? Yo... no entiendo que hace ella aquí-dije en una mueca-
-Pues, si Song Kang no te lo dijo. Estamos saliendo-
-¿Qué?-espeté-
-Eso no es cierto, Samantha-
-¿Qué no es cierto? Claro que sí-
-No, nunca dije que saliéramos. Si follé contigo no significa que estemos saliendo-
-Pero... yo...-
Apenas pudo hablar, estaba avergonzada. ¡Kang acaba de negarla, delante de mí! Samantha me miró y luego llevó su mirada a Kang para salir corriendo de la casa de este.
-Eso no fue agradable...-
-¿Qué esperabas? ¿Qué le diera que si salía con ella, para la que este saliendo llorando fueras tú?-
-Bueno...-
-¿Qué querías decirme?-
-¿Por qué lo hiciste? Mi padre casi te ve...-
-Ese imbécil se lo merecía-
-Mira cómo te dejó la cara...-
Susurré mientras pasaba las yemas de mis dedos por su mejilla, y tomaba su barbilla.
-Si tú no me besas, lo haré yo-susurré-
