Acomodó mi cabello y tomó mis mejillas con sus tibias manos, me vio fijamente y me sonrió, para luego besarme.
-Tuve un mal día-respondió- Pero ahora que te veo, todo está mejor-concluyó-
-Qué bueno-di un suspiro de alivio-Pensé que hice algo mal, y no quería tener mi primera pelea contigo, acabamos de empezar...- cuando me beso-
-Hablas mucho-sonrió-
-Entonces no dejaré de hablar hasta que me beses nuevamente- reí, el sonrió y me besó-
*
-Llegamos, princesa- indicó mientras estacionaba el carro frente mi casa--Gracias Kang- besé su mejilla y me giré para bajarme cuando su mano me detuvo-
-¿Y si te rapto? - sonrió-
-¿Hablas en serio? - el asintió-¿Mejor por qué no pasas? Mi madre esta de viaje y mi padre regresa en la noche del trabajo-
-¿Segura que no hay nadie? - preguntó, yo asentí, el bajo del carro y ambos entramos- Tu casa es muy bonita-sonrió-
-Gracias, pero más bonito eres tú-dije, mientras giraba para besarlo-
-¿Qué te parece si vemos una película? - propuso-
-Seria genial, mira allí están las pelis- señale-Escoge una y yo... voy por las palomitas ¿Si? -él asintió, me dirigí a la cocina y tomé de los estantes una bolsa de palomitas, la coloqué en el horno microondas, poco a poco empezaron a reventar... Luego de estar listas, las coloqué en un tazón pero luego sentí unos tibios labios en mi cuello- Kang...- reí-
-Ya coloqué la película-dijo, mientras me rodeaba con sus brazos y besaba mi cuello cada vez más 'Provocativamente'-
-Bien, las palomitas ya están-sonreí, mientras giraba, para luego encontrarme con esos ojos y esa mirada que me volvía completamente loca-
-¿Sabes? Desde el primer día que te vi, supe que eras para mí-sonrió-
-¿Por eso siempre me vigilabas? -reí-
-Tenía que cuidar lo que es mío-respondió, mientras me besaba y bajaba sus manos lentamente hasta llegar a mi trasero-