El soltó una carcajada, yo no le veía la gracia a esto, sentía como mis mejillas hervían de las rojas que estaban.
—Vístete pero YA—ordené, para luego salir de mi pieza—¿Ya? —pregunté desesperada—
—No—rió el—
—¿_____?—preguntó mi madre, abrí los ojos como plato y me metía rápidamente a mi pieza—
—Escóndete—indiqué—
—¿Por qué? —preguntó—
—Mi mamá y si te ve.. Asi me regañará—respondí, metí lo más rápido posible a Kang en mi closet y la ropa mojada que este dejo al baño—
—¿_____ estas?—se asomó a la puerta, yo cerré rápidamente la del baño y me acomodé en la cama—
—¿Qué ocurre madre? —
—Eso me pregunto... Estas rara—
—¿Rara? No, solo... tuve una pesadilla y bajé por un vaso de agua—sonreí—
—¿Y el vaso? —preguntó, inspeccionando mi pieza con la mirada—
—En la cocina—respondí nerviosa, por Dios hasta Mía mentía mejor que yo y eso que solo tenía cinco años—
—Bien... Mejor descansa que mañana hay clases—indicó, yo asentí, besó mi frente y se retiró cerrando la puerta detrás de ella, me levanté rápidamente y me cercioré que mi madre se metiera a su pieza, di un suspiro de alivio—
—¿Sabías que esa posición y en ese pijama te vez mas deseable? —susurraron—
—Mierda...Kang—le reté por lo más bajo—¿Te di cinco minutos y solo te pusiste el pantalón? —pregunté molesta—
—Mi amor no soy flash—sonrio coqueto—
—No claro que no, el es mas... sexy—rei, lo hice a un lado y caminé hacia mi móvil, el me tomó en sus brazos—Bajame—ordene—
—Te vez mas sexy enojada—indicó—Grrr—gruñó juntando sus labios graciosamente, yo solo solte una suave risa—
—¿Sabes como te verías más sexy tu? —
—¿Cómo? —
—Con mi mano... Marcada en tu rostro—indiqué seria—
—Que ruda—
—Que estúpido—contesté—
—Así te gusto—sonrio—
—Gustabas—corregí—Ahora bájame antes de que te golpee—dije, el me colocó en el suelo y me beso—¿Qué tienes? —
—¿Ahora? A la mujer perfecta—contestó—
—No me refiero a eso, no tienes ningún derecho para besarme, no eres nadie ¿Entendiste? No lo vuelvas a hacer—
—Mirame—exclamó, tomó mi rostro y beso mis labios nuevamente—
—Basta—dije por lo mas bajo no quería que mis padres nos escucharan—¿Acaso te es difícil entender que no quiero que me beses? —el me tomó de la cintura y me apegó más a él—
—Dime como puedo olvidar esos hermoso ojos—exclamó cerca mío—No puedo sacarte de mi cabeza, dime que mierda me hiciste—preguntó para luego besarme, esto se le estaba haciendo más que costumbre—
—Lo peor que pude hacer, entregarte todo mi amor—respondí—
—Lo siento, ya te pedí perdón que más quieres que haga, dime, solo quiero que regreses conmigo—
—¿Para que para que cuando cumplamos un mes te vea besando a otra? No sabes cuanto me dolió, no sabes todo lo que causaste en mi aquel día—
—Claro que lo sé, sé que por mi culpa estas con Jimin, yo mismo perdí tu amor, te perdí, pero solo te pido una oportunidad—
—No...—negué—
—Por favor...—
—No, primero cambia, pero no lo hagas por mí si no por ti... dime una cosa ¿Acaso crees que me gusta verte golpear a los demás? ¿Acaso crees que se ve bonito cuando una persona te cele tanto? ¿Cuándo te dicen que usar? —
—Pero...—
—Ningún pero, aunque... ¿Por qué no haces eso con Madisson? A ella si la podían ver en short, a ella si se le podían acercar hombres, a ella si... ¿No?
—Eso es diferente—indicó—
—Dime por que con ella es diferente—
—Por que a ella no la amé tanto como a ti...—susurró cerca, demasiado cerca de mis labios