Solté una risa ante su acto de celos. Dio un paso a mí, hundí mis largos dedos en su cabellera y lo atraje a mí, buscando su boca. Me levantó, rodee mis piernas en su cadera y gemí ante el roce de su erección en mi sexo. Kang hundió su cara en mis pechos, besó cada uno de ellos y pasó su lengua luego. Le tomé el rostro y lo observé por unos segundos para besarlo alocadamente y apasionadamente.
Caminó hacia la cama y me recostó ahí. Se colocó encima de mí, acarició mi muslo; luego mi trasero y una sonrisa apareció en su rostro.
—Quiero hacerte el amor, ______.
—Pensé que solo follabas.
—Contigo es diferente.Hundió su cara en mis pechos, bajó lentamente hasta mi abdomen. Pasó su lengua por mi ombligo, no pude evitar gemir. Separó mis piernas e hizo que su erección rozara con mi sexo, yo solo jadee.
—¿Sientes eso? Es lo que ocasionas en mí...
Susurró seductoramente en mí oído, haciendo que me estremezca. Tiró de mí brasear, dejando mis pechos al aire. El color se me vino al rostro, él lo notó y besó ambas mejillas mías. Besó mi cuello, yo solo disfruté la sensación que me hacía sentir. Bajó a mis senos, besando cada uno. Tomó un seno con la mano izquierda, masajeándolo. Mientras succionaba el otro con la boca.
<< No sabes cuánto esperé para esto >>
<< ¿Confías en mí? >>
<< Shh... jugaremos, ______ >>
<< Lo harás >>
<< Si coperas, será más... >>
<< ¡Eres una maldita perra! >>
<< Cállate o te mato >>
<< ¡Por un demonio, cállate! >>
<< La droga ya debería de estar haciendo efecto >>
<< Sí _______ duerme, recordarás esto para siempre >>
<< Tú eres mía ¿Oiste? Nunca más me dejaras. Nunca. Nadie me separará de ti >>
—______...
—No, por favor.
—¡______!
—Suéltame, suéltame.
—Abre los ojos, _______.
—No me toques ¡No!
—¡Joder! ______ abre los ojos.
—No me golpees, no diré nada. Lo juro... lo juro.Él estaba ahí encima de mí. Podía verlo, aunque la luz no ayudaba mucho. Estaba golpeándome, mientras me golpeaba. Lágrimas sin control brotaban de mis ojos, no quería. No quería ser violada. Otra vez no.
—______
—¡No!Levanté la voz, me tomó de las muñecas, para luego sacudirme bruscamente. Trataba de forcejear pero era imposible. Tenía más fuerza que yo.
—Mierda ______ basta.
—No, me violes; por favor. No quiero, por favor...
—¡Joder!Una mano impactó mi mejilla, abrí los ojos inmediatamente y lo tenía frente a mí, con la mirada fría... oscura. Los labios firmes y la respiración agitada. Parpadeó y bajó la mirada.
—Lo siento...
Susurré. Él se quitó de mí, se acomodó al lado mío; mientras exhalaba bruscamente. Parpadeé por unos segundos ¿Qué acababa de hacer? Él... él me golpeó.
—Me pegaste...
—Estabas como loca ¿Por qué hiciste eso?
—¿Hacer qué?
—Gritar, pensé que estabas de acuerdo.
—Lo estoy, solo... tengo miedo.
—No te lastimaré.
—No estoy segura de eso.Dije tímida. Él tomó el cobertor y nos cubrió con él. Sabía que le molestó mi comportamiento, pero no podía. Aun no superaba aquella noche. Quería hacer el amor con él, pero mi mente jugaba doble.
—Lo siento...
Susurré arrepentida. Por lo ocurrido, él colocó su mano derecha encima de mí y me atrajo a su cuerpo. Apoyé mi rostro en su pecho, y lágrimas recorrieron mis mejillas.
—No llores.
—No te enojes conmigo.
—No estoy enojado, solo... olvídalo.Negó. Se levantó de la cama y empezó a caminar por la habitación ¿Acaso se iría?
—¿Te vas?
Pregunté con la voz quebrada.
—No, ten póntelo.
Indicó, sacando un camisón de mi pequeña cómoda. Apagó la luz y se acercó a mí nuevamente. Tomé el camisón y me puse. Se metió a la cama, acarició mi mejilla y la besó.
—No quise golpearte.
Sonaba arrepentido. Yo asentí, se introdujo en la cama y lo abracé, él aceptó mi abrazó. Besó mi cabello.
—Deja de llorar por favor.
—Te amo.
—Yo más, ahora duérmete ¿Si?Yo asentí, besé su pecho desnudo y me quedé dormida en segundos. Al despertar levanté la vista, y ahí lo tenía. Se miraba sexy, más de lo acostumbrado. Teníamos las piernas cruzadas y Kang me tenía rodeada con la mano izquierda. Giré tratando de no despertarlo y tomé el despertador en mano, eran las nueve de la mañana.
—¿Nerviosa?
Susurraron en mi oído. Giré rápidamente y el me atrapó con sus suaves y tibios labios. Me tomó en brazos, sonreí.
—Te amo.
—¿A pesar de lo de ayer?
—A pesar de lo de ayer.
—______.Llamaron a la puerta, ambos no miramos nerviosos.