Capítulo 12

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STILES

Hoy es martes.

Yo llevaba casi todo el día pensando en lo que me dijo anoche mi padre.

Flashback

Era lunes por la noche.

Mi madre estaba en el trabajo y mi padre estaba sentado en un sillón viendo la televisión.

Yo acababa de llegar de dar una vuelta con Derek, Liam y Theo.

— Hola, papá.

— Hola, hijo. ¿Que tal?

— Bien.

Estuvimos un rato hablando sobre varias cosas hasta que yo no aguanté más la curiosidad y le pregunté.

— ¿Has averiguado algo sobre, bueno... ya sabes?– dije un poco nervioso.

Yo pase todo el fin de semana con Derek, dormimos en la casa de Regina, así que el domingo por la noche en cuanto pillé un momento a mi padre solo, decidí pedirle ayuda.

Le conté la sospecha de Regina del posible asesinato del padre de Derek y como él es el sheriff le pedí o más bien supliqué que lo investigara.

Él se sorprendió mucho ante lo que le conté, pero al final accedió.

— Bueno,– dijo mi padre– he revisado los informes y algunas pruebas y hay cosas que no encajan. Creo que Regina puede tener razón en sus sospechas.

— Joder.

— ¿Derek sabe algo de todo esto?– yo negué con la cabeza.

— Y si se confirma no sé ni cómo decírselo, ni cómo se lo tomará– dije con tristeza.

— Será difícil, pero creo que con que estés a su lado bastará para ayudarle a aceptar la verdad, Stiles. Se nota que te quiere mucho– yo sonreí con timidez al escuchar eso.

Fin del Flashback

El sonido de la voz de mi madre interrumpió mis pensamientos sobre la conversación que había tenido con mi padre la noche anterior.

— Stiles, cariño, ya ha llegado Derek.

Hoy había quedado con Derek para que me ayudara con Matemáticas, ya que me estaba costando mucho y a él se le daban genial.

Ventajas de tener un novio que se le den bien los números.

Cuando escuché a mi madre decir que ya había llegado fui rápidamente a junto él y lo saludé con un beso.

Mi madre nos vio y nos sonrió con ternura.

A continuación lo lleve a mi habitación.

— ¡Quiero que esa puerta esté abierta!– gritó mi padre y yo rodé los ojos.

— ¡Noah! ¡Déjalos!– le contestó mi madre.

Dejamos las cosas en el escritorio de mi habitación y estuvimos hablando un poco antes de ponernos a estudiar.

Llevábamos como aproximadamente media hora estudiando cuando escuchamos ruidos que venían de la entrada de la casa.

Derek y yo decidimos ir a ver qué era o que pasaba.

En cuanto llegamos y vimos lo que estaba sucediendo, ambos nos quedamos muy sorprendidos.

Ante nosotros se encontraba mi padre discutiendo con una persona, al lado de él estaba mi madre con el ceño fruncido, y esa persona con la que estaban discutiendo no era ni más ni menos que Talía Hale.

MAMÁ, SOY GAYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora