El ambiente entre Soojin y Felix ese día estaba cargado de una tensión palpable, haciendo que todo se sintiera extraño y fuera de lo común. Soojin comenzaba a sentirse desanimada y mal por la situación.
Minutos después de que Felix saliera de la ducha despertado por su amiga, regresó a la sala donde ella lo esperaba, sentada en la pequeña mesa circular.
La menor lo recibió con una sonrisa dulce, sin embargo, más tarde que nunca notaría que la sonrisa de él era más una mueca desanimada que un gesto genuino. Aun así, Felix agradeció a Soojin por la comida con una mirada rápida encontrándose con sus ojos, generando un sutil cosquilleo en él. Apartó la mirada rápidamente hacia su plato, esperando que el ligero rubor en sus mejillas no fuera evidente.
El tiempo transcurrió en un silencio incómodo, solo interrumpido por el suave tintineo de los cubiertos sobre los platos. Mientras el plato de Soojin se iba vaciando, el de Felix aún conservaba buena parte de su contenido. Ella lo observó detenidamente, captando su lentitud y la forma en que evitaba encontrarse con su mirada.
Soojin tenía una idea de lo que le sucedía a Felix, vamos, era obvio; y entendía su actitud distante. Lo que realmente deseaba era escucharlo de sus propios labios.
—¿No te gusta, Lix? Me esforcé para ti. —murmuró Soojin con suavidad, sus labios formaron un pequeño puchero.
Felix negó, sus ojos aún evitaban el contacto directo con ella.
—Claro que me gusta, está rico, Soojin, de verdad... —respondió manteniendo la mirada fija en el tenedor, removiendo con desgano el contenido de su plato.
—Felix. —llamó Soojin cambiando su tono de voz, sonaba ligeramente más seria, aunque no perdía la dulzura y suavidad de su voz.
—¿Mmhm?
—Felix, mírame. —Soojin posó su mano sobre la de él, intentando capturar su atención.
El rubio obedeció, únicamente levantando la mirada hacia el frente, evitando su contacto visual, lo que hizo que Soojin suspirara profundamente.
La castaña se acercó más a él, tomó su barbilla con delicadeza y giró suavemente su cabeza hacia ella, logrando que sus miradas se encontraran.
—¿Por qué estás molesto conmigo, Lixie?
—No lo estoy. —Felix apartó su cabeza, intentando desviar su atención hacia su plato. Soojin, sin embargo, volvió a tomar su barbilla, obligándolo a mirarla de nuevo con insistencia.
—Deja de actuar como un niño, eres un adulto.
—¿Disculpa? Estoy perfectamente bien, no ocurre nada, Soojin. —masculló apartándose nuevamente, con el ceño fruncido.
—Somos mejores amigos... ¿Por qué no me quieres decir qué ocurre, eh? —aquellas palabras resonaron en el aire, como un golpe directo al corazón del rubio.
Por otra ocasión más, sintió esa misma sensación extraña en su pecho, similar a la que experimentó al ver las fotos horas antes.
—Ya basta, solo estoy algo cansado, trabajé mucho hoy.
—Mentiroso. —Felix rodó los ojos y volvió a apartar la mirada, continuando con su comida como si nada.
Soojin se quedó mirándolo durante unos segundos y dejó caer su cabeza en el hombro de su amigo, totalmente rendida. Soltando un pesado suspiro, decidió confesarlo por fin.
—Estás molesto porque estuve con Hyunjin anoche, ¿no es así?
—¿Lo estuviste? Ah, no lo sabía, genial. —respondió Felix, intentando sonar despreocupado.
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𝑳𝒐𝒗𝒆𝒔𝒊𝒄𝒌; 𝙷𝚢𝚞𝚗𝚓𝚒𝚗 𝚢 𝙵𝚎𝚕𝚒𝚡 ⁺¹⁸
FanficEn medio del torbellino universitario, Jang Soojin, una joven de 19 años, se topa inesperadamente con Hyunjin y Felix, dos ex mejores amigos que ahora son rivales irreconciliables. Unidos por un pasado compartido y un amor no correspondido por la mi...