El último descendiente Peverell

Capítulo 23: Un Verano Diferente

A la mañana siguiente, Harrison se levantó con mucha pesadez. A pesar de estar otra vez en su hogar, el se sentía extraño... se sentía diferente. Ese encuentro con la Muerte le había afectado de una manera que ni él mismo podía describir. Y no solo eso, dicho encuentro le hizo pensar en demasiadas cosas. Por supuesto, eso solo provocó que no pudiera descansar de forma correcta.

-Buenos días, Horus_saludó Harrison a su fiel amigo. Mientras decía eso, comenzó a levantarse de su gran cama. El fénix dio un chillido de alegría y, de inmediato, cubrió la habitación con un calor muy acogedor

Mientras que Harrison se preparaba para comenzar su día, Horus le recordó algo de suma importancia.

-Cierto... Todavía debo de mandarles una carta a mamá y papá avisándoles que no podré visitarlos este verano_agradeció Harrison desde el baño de su habitación. Apenas estaba terminando de cepillar sus dientes

Después de unos minutos, Harrison finalmente salió del baño, listo para comenzar un nuevo día.

-¿Que tal este conjunto de ropa? La verdad es que siempre he pensado que los muggles tienen mejor estilo que nosotros_le comentó un sonriente Harrison a su fénix. Este último solo asentia con la cabeza. Su atuendo del día consistía de un conjunto deportivo color negro, acompañado de unos tenis color blanco

-Este conjunto es bastante cómodo. Aparte de que es resistente al calor_dijo Harrison, mientras terminaba de amarrar sus agujetas. Una vez que había terminado, ahora sí, estaba listo para comenzar el día

-Recuerda que hoy visitaremos a Erris, Horus. Espero y seas amable con ella_dijo el joven Peverell sin ver al fénix. Horus solo dio un chillido de indignación por lo que había dicho su amigo, y, de inmediato, desapareció en un torbellino de llamas azules

Antes de que Harrison pensara en salir de su habitación, llamó a su elfo principal y de mayor confianza.

-Vooky_llamó Harrison. Apenas y había terminado de hablar, y ya tenía al elfo en su habitación

-Buenos días, maestro Harrison. ¿Se le ofrece algo el día de hoy?_Vooky preguntó con mucha emoción. A pesar de que Harrison ya le había dicho al elfo que fuera más calmado, este último parecía hacer caso omiso a dichas palabras. Vooky siempre parecía estar emocionado de atender a Harrison Peverell

-Buenos días para ti también, Vooky..._saludó Harrison amablemente. Después de saludar al elfo, volvió a hablar

-Necesito que busques, y si es necesario, que compres, todos los libros, pergaminos u objetos relacionados con la Muerte..._terminó de decir Harrison, para después dar un largo suspiro. Su experiencia con la muerte hace apenas unas horas, le había hecho pensar en tantas cosas. Durante su horas de insomnio se decidió que investigaría más a profundidad el tema de la Muerte

-Vooky se sorprendió por la petición hecha por su maestro, pero no dijo nada. El no iba a contradecir una orden de su maestro Harrison, jamás. Pero eso sí, le siguió pareciendo curiosa la orden-Entendido, maestro Harrison. Volveré lo más pronto posible_dijo Vooky con mucha emoción. En menos de un segundo, Vooky desapareció

-Luego de estar unos minutos en sus pensamientos, Harrison habló-Debo de dejar de pensar en esa experiencia... Si sigo pensando en lo mismo solo me haré daño_pensó Harrison con cierto temor. Recordar la sola presencia de la Muerte hacia que su cuerpo se pusiera erguido

Sin nada más que decir y tratando de alejar esos pensamientos de su cabeza, Harrison salió de su habitación, ya listo para comenzar su día con un buen desayuno. Aunque eso si, sabía que sus abuelos tendrían muchas preguntas para él...

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-¿Que harás con la Piedra Filosofal?_fue la pregunta que hizo Antioch Peverell, viendo con mucho interés a la famosa Piedra Filosofal