Capítulo 4: Una Verdadera Familia

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18 de octubre de 1986, 07:00 am, Residencia Calderon-Boot, Pittsfield Massachusetts

Los primeros rayos de luz empezaban a entrar por las ventanas de una de las muchas habitaciones de la residencia Calderon-Boot, en esta habitación se encontraba ni más ni menos que Harrison Peverell. El niño solo podía sentir la calidez de los rayos del sol, eso solo significaba que ya era otro día y con eso pensado empezó a levantarse, cuando se levantó y vio su habitación inmediatamente recordó el día que llegó a la residencia de Ivy y Edward, las personas a las que ahora mismo tenía un gran cariño, aparte de que a ambos los veía como sus figuras paternas...

(Escena retrospectiva)

Después de despedirse de Ivy, Harrison y Celestine habían aparecido a través de la red flu en un lugar desconocido, al no estar acostumbrado todavía a la red flu, Harrison cayó en el suelo cuando llegó, Celestine lo ayudo a recomponerse, el niño solo le dio una sonrisa en señal de gracias y ambos empezaron a avanzar. El lugar era un restaurante muy parecido al Caldero Chorreante, Harrison empezo a suponer que esté lugar era uno donde los magos podían estar, sus sospechas fueron confirmadas cuando empezo a ver a magos y brujas en el local, Harrison notó que los clientes saludaban alegremente a Celestine, esto solo hizo poner una interrogante en la cara del niño pero decidió preguntar más tarde, antes de salir del local, Harrison decidió preguntar algo...

-¿Supongo que este es un lugar de magos o me equivoco? Y ¿Como se llama este local?_pregunto Harrison con emoción en su voz

-Celestine solo sonrió para después contestar-Estas en lo correcto, estamos en el Callejón Beacon Hill, en Boston Massachusetts y por lo otro, estamos en el Jabalí de Oro, un lugar muy popular entre la comunidad mágica Norteamericana_dijo Celestine viendo que el niño se sorprendia

-Despues de la explicación Harrison puso una cara de confusión ya que se suponía que irían a la residencia Calderon-Boot así que decidió hablar-¿No se supone que íbamos a la residencia de la señorita Ivy?_pregunto Harrison

-Ella no dijo nada y tomo la mano del niño para inmediatamente salir del local donde estaban, cuando salieron dejo que Harrison viera como era el callejón Beacon Hill en su lado mágico-Este es el callejón Beacon Hill, aquí se puedo obtener todo lo que una bruja o mago necesité, desde ingredientes de pociones hasta escobas para jugar Quidditch_termino de hablar Celestine pero no sé percató que Harrison no le puso atención en nada de lo que dijo

Harrison veía de manera atenta todo el lugar, era más grande que el callejón Diagon, incluso se atrevía a decir que era mejor, había muchos más tiendas que en el callejón Diagon. Harrison empezo a avanzar por el callejón Beacon Hill seguido de cerca por Celestine que se divertía al ver la reacción del niño, Harrison entre más avanzaba más feliz se ponía, este lugar sin duda lo hacía sentir como en casa, volteo hacia su acompañante para preguntarle algo...

-Antes de preguntar, Harrison volteo hacia un reloj en una de las tiendas y vio que ya eran las 5 de la tarde, se giro hacia su acompañante para hablar-Por cierto, Celestine, ¿A qué venimos a este lugar?_pregunto Harrison sin verla a la cara ya que estaba viendo unas escobas en una tienda de Quidditch

-Ella se aclaró la garganta para hablar y comenzó-Mi tía me pidió que te trajera aquí para comprarte un poco de ropa, al igual que objetos que sean necesarios en tu estancia en la residencia_termino de decir Celestine pero se sorprendio de la reacción del niño

-Harrison se sorprendio mucho ya que jamás se espero ese detalle de la señorita Ivy pero sabía que estaba mal así que empezó a hablar rápidamente despues de lo dicho por Celestine-No puedo aceptar eso, ya es mucho con que la señorita Ivy me deje vivir en su residencia, aparte yo también puedo comprar mis cosas_dijo Harrison en un tono amable

El último descendiente PeverellDonde viven las historias. Descúbrelo ahora