HOPE

Capítulo 41: A punto de colapsar

Camila's POV.

Camino apresurada por el pasillo principal del hospital, los padres de Caroline nos acaban de avisar que salió de cirugía y ahora solo queda esperar a que reaccione de la mejor manera posible, sin embargo la cabeza no deja de darme vueltas; Daniel nos reunió a todos en cuanto se enteró sobre Ariana Hoffman y hasta el momento no he podido salir del shock. Sé que los celos pueden llegar a ser extremos en ocasiones, porque no medimos cómo reaccionamos y solo nos dejamos guiar por las emociones del momento, pero ¿arrollar a alguien?, eso no sonaba nada cuerdo.

—Acaban de avisarme que la prima de Ariana ya está aquí —comenta Lisa en cuanto la encuentro fuera de la sala que da a la Unidad de Cuidados Intensivos, porque sí, mi pitufina fue internada en UCI ni a penas salió de la intervención.

—Le avisaré a los padres de Caroline, fueron a tomar un café y regresan en un momento.

Lisa asiente triste, todos hemos visto cómo Richard y Andrea Hope están cargados de dolor y preocupación, ninguno de nosotros ha dormido en todo el día que Caroline lleva en urgencias, pero el desgaste que ellos tienen es mucho más profundo que el de nosotros.

También siento lástima por Lisa, ella ha decidido optar por aplazar su ingreso a UCR durante algunas semanas hasta que las clases hayan culminado, igual que Ed. Porque ninguno de los dos tiene cabeza en este momento para irse lejos de aquí.

—Que le avisen a la policía ni apenas tengamos la información que necesitamos—me comenta.

—Cuenta con ello.

Dicho esto, cada una regresa a lo que estaba haciendo, Lisa continúa esperando el momento en que puedan darnos acceso o al menos a los padres de Carol para entrar a verla, aunque conocemos que será muy duro.

Empiezo a caminar de regreso, en dirección a la cafetería y finalmente encuentro a los padres de mi mejor amiga tomando una taza de café cada uno, el señor Hope se ha terminado un sandwich pero Andrea solo lo ha mordisqueado, propio de su preocupación.

—Señores Hope —digo en cuanto llego junto a ellos— la prima de Ariana Hoffman acaba de llegar al hospital y conversará con Daniel.

Ella toma un mechón de su cabello y lo coloca tras su oreja, luego suelta un suspiro tan largo que me hace sentir que el corazón se me rompe por verla tan frágil; por el contrario, su esposo asiente con fuerza, él ha prometido hacer pagar a quien le haya hecho esto a su pequeña niña.

—Ahora vamos —comenta él poniéndose de pie al instante— por cierto, Camila, ¿has visto a los abuelos de Caroline?

—Sí, me dijeron que irían a descansar un rato en su casa —le respondo— y que en cuanto tengamos noticias, les avisemos.

—Bien, ¿vamos, amor? —pregunta en dirección a su esposa, ella asiente y se pone de pie junto a él, luego caminamos los tres hacia el área UCI.

-xxx-

Han pasado dos horas desde que Lorraine Hoffman arribó a Trunstong y aún no tenemos información de lo que ha pasado.

Lisa y Ed se encuentran sentados frente a mí, ella mira a la nada y de vez en cuando hace una oración pidiendo por la salud de Caroline, no me considero creyente ni nada pero oírla hablarle a Dios con tanta quietud en sus palabras me reconforta y una luz de esperanza se enciende en mí, por eso cada que pide que la ayudemos a hacerlo, aceptamos gustosos. Ed por otro lado, no ha dejado de tararear canciones —es mi manera en cómo afrontar esto— nos dijo en cuanto le preguntamos por qué lo hacía, y eso nos ayudaba también, necesitábamos lo que sea para que nuestra enana vuelva a estar con nosotros como antes, con ese desborde de alegría que solo ella sabe darnos.

—¿La familia de Caroline Hope? —un médico alto y algo canoso llega frente a todos nosotros, el corazón me late fuerte, miro a los demás y presiento que todos estamos en la misma expectativa.

—Sí, somos nosotros —comenta el señor Richard poniéndose de pie junto a todos los que estamos ahí— somos sus padres.

—Bien, ya pueden pasar a verla si así lo desean. Pero tengo que advertirles algunas cosas —dice el médico algo inquieto.

Los padres de Carol asienten, percibo en ellos el temor y en mí también.

—Su hija aún no está consciente, la hemos mantenido sedada mientras recupera un poco la fuerza. Pasó por una cirugía de varias horas porque presentó algunas lesiones significativas.

—¿C-cómo cuales? —pregunta asustada su madre.

—Pues, la señorita Hope llegó con algunas contusiones en el área del pecho y decidimos hacerle una tomografía a sus pulmones para poder ver el daño mucho mejor, es algo delicado.

—Oh, Dios.

—Lo positivo es que sus pulmones están bien, no hay ningún neumotórax pero debemos estar chequeando constantemente, cuando se despierte lo más probable es que no tenga muchas fuerzas para hablar.

El señor Hope se veía pálido, parecía que iba a desmayarse en cualquier momento, su esposa lo abrazó y pidió al médico que siguiera hablando. Yo no entendía mucho de lo que decía, pero sabía que era algo complicado.

—Bueno, también tiene el fémur fracturado, y tuvimos que esperar a que se estabilice de la anterior intervención para colocarle algunos tornillos. La tendremos todo lo que resta del día en el área UCI, y luego va necesitar estar unos días hospitalizada para monitorearla...

La mente se me nubló, ¿cómo es que Caroline llegó aquí?, ¿cómo llegamos todos aquí? Sentí que las piernas me temblaban y empezó a oscurecerse mi visión.

—Cami, tranquila —Lisa se acercó a mí y me tomó con sus brazos— Cariño, ¿puedes pasarme un poco de algodón con alcohol?

Ed asintió y sacó del bolso de su novia lo que le había pedido, veía que el médico seguía hablando con los padres de mi mejor amiga pero no podía oír lo que decían, Me sentía muy débil.

—Ten, ponte esto en la nariz —me dijo Lisa.

Accedí e hice tal como ella me dijo, mi cuerpo poco a poco fue recuperando vitalidad y la vista se me aclaró. Al fin pude oír que el médico les decía que podían entrar a verla, pero por ahora solo sus padres, más tarde, si todo iba bien podríamos entrar nosotros.

—Vayan a verla y cuidar de ella —les dije en cuanto recobré la compostura.

—¿Estás más tranquila, hijita? —me preguntó la madre de Carol.

—Sí, lo siento... Fue muy...

—Lo sé. Me esperaba oír noticias así, pero creía que luego de tanto llorar estaría lista —dijo agachando la cabeza— y no. Es mi bebé, y yo no estuve ahí para protegerla.

Todos guardamos silencio, fue el sentir que tuvimos desde el inicio, ¿cómo se sintió Caroline cuando pasó todo? ¿Insegura, desprotegida, asustada?

Mi celular vibró, miré la pantalla y vi una llamada de Daniel. Contesté.

—Dani, hola.

—Hola, tengo noticias.

—Igual yo —comenté triste.

Él guardó silencio por un momento, se notaba lo mucho que quería a mi mejor amiga, todos lo hemos percibido.

—¿Cómo está ella? —preguntó luego de permanecer callado.

—Es difícil explicarlo por aquí, ven al área UCI y te cuento.

—Okay, ahora voy en camino.

Pero antes, debía averiguar qué fue lo que pasó con Lorraine Hoffman.

—¿Qué noticias tienes tú? —le dije intrigada.

Él soltó un suspiró y respondió.

—Me he enterado algunas cosas sobre Ariana, y créeme —hizo una pausa— es más complicado de lo pensábamos. Necesitamos ayuda.

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