Capítulo 14: Intentemos

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Doce minutos después de haber desayunado. Camila, Naomi y yo nos encontrábamos caminando en sincronía a la escuela.

Habíamos acordado ir juntas para iniciar la misión "Hugo-Naomi" (aún no teníamos un nombre para la futura pareja) y Camila decidió que la mejor idea era espiar al hermano menor de Ed, el resto del día.

—¿Y si no le gusto? —la aterciopelada voz de Naomi me desvió la vista a ella. Llevaba un vestido floreado que adornaba un gran cinturón rojo brillante, debido al frío había decidido combinar con unas medias negras largas, que estilizaba su pequeña figura. El cabello rubio ligeramente ondeado la hacía ver algo mayor, y el labial transparente le recobrara el aura de ternura.

Estaba bastante hermosa.

—Todo saldrá bien, nena —la abracé y ella sonrió ante mi gesto.

Los pronósticos habían decretado que el siguiente mes sería un poco más crudo.

Soplé jugando con el vapor que emanaba de mi boca. Sonreí y seguí abrazada a ella.

—Pareces más hermana de Carol que mía —se quejó Camila. Hice una seña para que se juntara con nosotras y accedió complacida.

Luego de caminar por las desoladas calles mañaneras de Trunstong. Llegamos a la escuela.

—El plan es este —Camila hablaba tomando su bolso fuertemente— tú ve a clases, Nai. Cualquier movimiento sospechoso de "aquel que no debe ser nombrado" nos avisas.

—¿Voldemort? —pregunté. Y rápidamente me tapé la boca— lo siento.

—Enana tonta. Me refiero a Hugo —Camila reía y asentí inocentemente.

—¿Ese es tu plan maestro?

—Nai, luego iremos Carol y yo al gimnasio. Y trataremos de hablar con él, aunque el plan será durante toda la semana.

—¿Y yo?

—Tú intenta ganarte su confianza entre clase y clase.

Sonreí.

—Es el plan más tonto del mundo. Creo que Naomi estará bien si lo conoce de a pocos... nosotras te ayudaremos en lo que necesites.

Ella asintió y se despidió de nosotras. La vimos alejarse y agitar la mano antes de entrar al aula que tenía programada.

—Quería el plan de espiar a Hugo —se quejó.

—Lo sé, igual yo, pero intentemos darle una oportunidad a Naomi. Quizás termine descubriéndose antes.

—O enamorándolo.

—Ojalá que sí —pensé en la pequeña Naomi y en Hugo juntos y se me hizo agua la boca de la ternura que darían si llegan a ser novios.

Realmente debe funcionar.

Dimos vuelta y empezamos a caminar a nuestra aula, aunque en el camino nos topamos con el verdadero "aquel-que-no-debe-ser-nombrado".

—Hola, chicas.

Miré a mi mejor amiga y ésta llevaba el rostro ligeramente inclinado.

—Hola, Voldemort —él sonrió confundido— digo: hola, Spencer.

Le di un pequeño golpe en el brazo a Camila para que reaccione.

—Eh, hola.

El brillo en los ojos del muchacho me hizo plantearme la razón por la que decidió chocar "sorprendentemente" hoy con nosotras.

—¿Puedo hablar contigo? —se dirigió a ella.

—No. Tengo clases, lo siento.

Y dicho esto Camila me arrastró al aula junto a ella.
Llegué exhausta y jadeando. Ella llevaba una triste mirada que hacía suavizar la mía.

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