Ámbar y Melani

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MELANI

Salgo de la habitación.

Dejo a Tyler solo, necesita su tiempo pensar.

Debería ir a buscar a Ámbar, pero no sé ni por dónde empezar. Y si en todo caso la encontrase, me echaría a patadas.

Comienzo a andar perdida por los pasillos. No tengo ni puñetera idea de dónde estoy. Decido salir al jardín principal, dónde están aparcados los camiones, a lo mejor desde allí logro situarme.

Al salir, me doy cuenta de que es de noche. No sé como se ha echo tan tarde.

A pesar de la oscuridad, logro identificar a la figura de Will sentado en las escaleras. Me acerco intentando no hacer mucho ruido, ya que seguramente la gente esté descansando.

Llego a las escaleras, y me siento sin decir ni una palabra a su lado.

- ¿Cómo está? - dice Will sin desviar la mirada del suelo.

- No muy bien. - hago una pausa. - ¿Y ella? -

Él suspira y deja sonar una leve risa.

- He intentando seguirla, pero me ha mandado un poco a pastar. He preferido dejarle su espacio. -

Nos quedamos en silencio.

- Me duele verlos así, de verdad. - dice Will. Me pasa una mano por encima y me tumbo en sus piernas.

- Lo siento mucho. - digo casi llorando.

- ¿Cómo cómo? - dice limpiando las lágrimas que empiezan a rodar por mis mejillas.

- Debería haberlos ayudado, haber intentado que no acabasen así. No soporto verlos sufrir. -

- Melani. Tienes que dejar de echarte siempre la culpa a ti misma. Tú has echo todo lo que has podido, lo demás depende de ellos. - dice acariciándome el pelo. Me seco las pocas lágrimas que quedan y me incorporo.

- ¿Cómo estás tú? - digo con una risa triste. - Todavía no sé como volviste a la base. - el se ríe suavemente.

- Es una historia bastante larga. - suspiro. 

- Tengo todo el tiempo del mundo. - el esboza una sonrisa. 

- Cuando me desperté, estaba a salvo en la base. Lo último que recordaba era como Ámbar había entrado a la celda a rescatarnos. El caso es que Tyler me contó cómo habías ido a ayudar a Ámbar y a salvar a Tyler, pero que no habíais salido de la cárcel. No sé como, entre unos y otros nos convencimos de que habíais muerto. - lo miro extrañada. Esa parte de la historia sí que no la conocía. - Nos pasamos varias horas llorando cada uno en nuestra habitación , cuestionándonos todo lo que podríamos haber hecho para salvaros, hasta que me negué a creer que eso había pasado de verdad, y decidí salir a buscaros. - hace una pausa. - Una noche, me encontré con una casa en medio del bosque, la casa del padre de Tyler. - lo interrumpo.

- Espera espera, esa casa también nos la encontramos nosotras. ¿Cómo que del padre de Tyler? -

- Como oyes, era la casa de verano de la familia Evanson, hasta que se separaron y el padre se mudó allí. - me quedo callada intentando atar cabos mientras Will continúa con la historia.

- Me acerqué a la casa para investigar, y escuché que la Guardia Real iba a empezar a buscar en el bosque. No me preguntes ni cómo, ni si estoy 100 por cien seguro de que esa información es real, porque no lo sé, pero decidí volver a la base a avisar por si acaso. Mi plan inicial era una vez que hubiese dado la voz de alarma, volver a buscaros, peeero para mi sorpresa, ya estabais aquí. - termina con una sonrisa. Me contagia la alegría y se la devuelvo.