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ÁMBAR

El olor me marea. La cabeza me da vueltas y apenas veo con claridad. La llama en mi mano tiembla, y se va apagando poco a poco. Me llevo la otra mano a la cabeza y cierro los ojos. 

- Donde nos habremos metido.- murmura Tyler a mis espaldas. 

Me doy la vuelta. Will sigue llevando a Melani en brazos. Está mirando a su alrededor en busca de una salida, lo más probable. Aumento la llama para que podamos ver mejor, aunque tampoco ayuda mucho. Sigo mareada. Me siento en el suelo mientras Will y Tyler buscan la salida.

- Los cadáveres parecen ser recientes. - dice Tyler mirando a su alrededor.

- Chicos. Está pasando algo raro. - dice Will con la voz entrecortada.

Me giro y veo como Melani está empezando a temblar. Su mano está cambiando poco a poco de color, cambiando a color negro. Rápidamente, se le empieza a extender por el brazo, hasta llegarle al cuello.

- Hay que salir de aquí ya, no podemos perder a Melani. - digo agobiándome mucho de golpe.

 Nunca me lo había planteado seriamente. Melani es un pilar fundamental en mi vida, de hecho, el único, y si ella no está, no puedo sacar las ganas para vivir. Es la única que ha estado ahí siempre, tragándose mis dramas amorosos con los libros, escuchando mientras repaso mis presentaciones para el instituto, dándome los mejores consejos, consolándome cuando lo necesito, y siendo el hombro al que llorar. 

Nunca me lo había planteado, pero simplemente, no puedo perder a Melani. Las lágrimas se a agolpan en mis ojos. Empiezan a resbalar por mis mejillas. Me las quito rápidamente con el antebrazo. Miro al suelo y respiro hondo. Pienso en la salida que tenemos que encontrar.

 Levanto la cabeza y miro a mi alrededor. Tyler se acerca a los cadáveres con cuidado. Está más cabizbajo y pálido que antes. Algo me llama la atención en todo ese desastre de cadáveres, es una pared, antes era blanca pero ahora está salpicada de gotas de color sangre. Sin embargo, no hay ningún cadáver a su alrededor. Me acerco lentamente, ladeo la cabeza y apoyo mi oreja en la pared. Doy unos golpes. Suena hueco. 

Me giro y veo a Will acercándose a mí mientras arrastra los pies. Miro a Melani y trago saliva. Se me hace un nudo en la garganta. Levanto la cabeza de nuevo y veo que Will la mira con atención. Le da un golpe con un pie en una grieta que hay abajo y de la que no me he percatado. Suena un chirrido horrible, me tapo los oídos. 

Tyler llega medio corriendo y se para a nuestro lado. La piedra se mueve por completo y deja ver otro maldito pasadizo oscuro. Suspiro. Enciendo la llama de nuevo y paso la primera. No tenemos que andar mucho para llegar al final del túnel. 

Al llegar, hay una puerta majestuosa, que la verdad no pega nada con la esta cueva tan tétrica. Miro fijamente la puerta, y me doy cuenta de que en la esquina de abajo hay un símbolo que me parece conocido. Miro hacia atrás, y veo una llama de esperanza en los ojos de Tyler y de Will.

- Es el símbolo de Windion. - dice Tyler.

- Podría ser una trampa y simplemente servir como distracción para que nos ataquen. - digo dubitativa. 

Entonces Will deja sutilmente a Melani apoyada en la pared y le toca cariñosamente la mano antes de dejarla. De repente siento una pizca de ilusión en mi interior. No sé por qué, pero solo quiero que llegue el momento en el que Melani despierte para poder contarle estos pequeños gestos de Will, que son los que tan loca la vuelven a la hora de enamorarse de alguien.

- Hay una simple forma de comprobarlo. Supuestamente estas puertas no se pueden abrir por mucha fuerza que hagas. Se trata de un código, que por lo que nos han enseñado tendría que estar aquí. - dice Will. 

Ámbar y MelaniDonde viven las historias. Descúbrelo ahora