Llegamos a casa después de que me sacaran de ahí
-Estás castigada -Zayn me señaló
-No podéis castigarme -les miré con los ojos entrecerrados -no sois mis padres, tenemos casi la misma edad, no tenéis derecho -
-Claro que lo tenemos, somos mayores que tú y estas castigada una semana -Liam se cruzó de brazos.
-Te castigariamos durante toda tu vida, pero te necesitamos para el Tour -Zayn imitó a Liam
-Pues vais listos si creéis que me vais a castigar -les di la espalda e intenté dirigirme a la cocina, pero alguien me cogió del brazo -Louis suelta -
-No, estás castigada -me cogí del marco de la puerta mientras el tiraba de mí -¡Noo! -mis manos me fallaron y se soltaron. Louis me puso sobre su hombro e intenté que bajarme mediante a golpes
Levanté la cabeza y miré a los chicos suplicante. Y me di cuenta que el único que no había dicho nada era Niall.
-Niall, mi irlandés preferido, por favor -intenté poner las manos juntas, pero en la posición que estaba era difícil. Él me miró y arrugó la nariz enseñando sus dientes.
-Yo... estoy de acuerdo con ellos -
-¡Date por muerta rubia! -dejé mis brazos muertos y volví a agachar la cabeza. Por suerte no estaba tan abajo, porque tendría el trasero de Louis en mi cara.
Louis me llevó hasta mi habitación y me dejó en la cama.
-Duerme, mañana hablamos -cerró la puerta y me dejó sola
Tienen suerte de que esté lo suficiente cansada como para no bajar.
Pero estaban exagerando, no había sido mi culpa.Lo que había pasado es que ayer pasaron unas cuantas cosas y luego lo otro y después no se que y bla, bla, bla... Bueno, el resumen es que Justin llegó ayer a Londres, nos vimos, estábamos en su coche y nos detuvieron.
Después nos llevaron a comisaría, donde los chicos me recogieron. Y esa es la historia de porqué ellos quieren "castigarme".
Es injusto, deberían castigarle a él.
***
Aunque aún llevara la cara de dormida con lagañas y apenas aguantaba de pie, me hice una coleta para dirigirme abajo, esperando que ellos no mencionen nada sobre la noche pasada.
Cogí el pomo de la puerta y tiré de él, pero no se abrió. Volví a intentarlo desesperadamente, pero volví a fallar.
-¡Chicos! -grité dando golpes a la puerta frenéticamente.
-Buenos días -alguien habló al otro lado, juraría que estaba sonriendo
-La puerta no se abre, no sé que pasa -volví a intentar abrirla
-Ay, Alex, mi inocente y pequeña Alex -sabía que el que hablaba ahora era Liam -no es una coincidencia -
-Es tu castigo -siguió... ¿Niall?
-Sois unos... ¿Y que pasa con lo de "hablamos mañana"? Sacarme de aquí -notaba como las venas del cuello me palpitaban.
-Eso no va a poder ser posible -genial, y venían todos para burlarse -estarás ahí durante unos días, sin móvil -miré por toda mi habitación, mi móvil no estaba.
¡MI MÓVIL! ¿QUÉ CLASE DE CASTIGO ES ESTE? Ni siquiera mi madre hacía algo así.
-No te molestes en buscarlo -dijo Louis -te he quitado el móvil y el portátil mientras dormías -