Michael
Estaba en mi habitación jugando con mi móvil. En unos momentos los chicos y yo empezaríamos un Live stream, pero me avisarían cuando empezáramos.
Escuché unos golpes en la puerta del balcón y también pude ver una silueta fuera.
¿Quién podría ser? Todos los chicos están dentro.
Aquella persona seguía fuera. Tal vez sea buena idea abrir, pero con algo con que defenderme por si es algún asesino en serie.
Busqué algo que me sirviera como arma, lo único que encontré fue una flauta que utilizaba en primaria. ¿Qué hace esto aquí? Yo ni siquiera sé tocar la flauta.
Cogí fuertemente el instrumento en mi mano y abrí la puerta rápidamente. Me sorprendí al ver a Álex ahí de pie. Parecía que había estado llorando y tenia mal aspecto, parecía cansada y débil.
-Por favor, no le digas a los demás que estoy aquí -
Nada más decir eso, se desplomó. Estuvo apunto de caer al suelo, me la cogí en brazo antes de eso.
¡¿QUÉ HAGO AHORA?!
Tengo a una chica desmayada, no estaba preparado para esto.
-¿Alex? Alex despierta -
La llevé a mi cama y la dejé ahí.
-Alex -
***
Alex-¿Me estás diciendo que no has comido nada? -
-No he dicho eso -
-Es lo que me has dado a entender -respondió Michael -oye no puedes seguir así -tal vez no había sido tan buena idea venir aquí -acabas de desmayarte, no tienes buen aspecto -
-Gracias... -
-Es que no sé, no me esperaba esto de tí, no pareces una chica a la que le importa lo que los demás piensen -
-¡Pues lo hace! Me importa, hago como si me diera igual, pero me afecta todo lo que dicen de mí -estuve apunto de gritar, pero me acordé de que los demás están en casa -yo...No puedo con eso y lo peor es que tienen razón, mírame Michael ¿Cómo podría gustarle a alguien siendo así? Soy un desastre y lo único que hacen es recordármelo -
-Alex... -
-No y lo peor es que tienen razón -
-Mira, ahora eres un personaje público, la gente te va a criticar siempre -él se levantó de su cama y camino de un lado a otro -yo paso por lo mismo, la gente me crítica por mi físico, pero ¿Qué puedo hacer? -yo me encogí de hombros -no voy a morirme de hambre solo por eso, me gusta la pizza -yo sonreí.
-Pero yo no soy como tú -
-No, pero tienes amigos a quienes les importas y te van a apoyar en todo -ya, no lo creo... -¿Por qué no le has contado esto a los demás? -
-¿Te refieres a Louis, Liam y a la demás panda de idiotas? -él asintió un poco inseguro -ellos se han enfadado conmigo, dicen que yo empecé la pelea con Perrie -
-¿Qué? Pero si fue ella, además te dijo eso ¿Por qué están enfadados? -
Gran pregunta.
-No lo sé, pero he escuchado como hablaban de mí. Se preguntan si estaban mejor sin mí, por eso me he ido -
-Pero... -Michael parecía confundido y volvió a sentarse en el borde la cama -serán imbécil, siempre diciendo que eres como una hermana pequeña y cuando alguien te insulta se... ¿Zayn también? -
-Sí, supongo que las ex novias van antes que las amigas -
-¡Michael! -escuchamos que le llamaban desde fuera de la habitación -vamos a empezar ya, ven -
-¡Voy! -gritó y me miró -no diré que estás aquí, pero vas a prometerme algo -yo asentí -vas a comer -puse los ojos en blanco -oye, no te he dado una charla para nada -
-Ahora no tengo hambre -
-Te traeré algo de comer y ya está -
Él salió de la habitación y después de unos minutos volvió con sándwich en un plato, me lo dejó en la cama y se fue otra vez para hacer Live Stream con los demás.
Yo me quedé sentada en la cama sin nada que hacer. No tenía móvil para distraerme y lo prefería porque no quería leer más comentarios. Así que me quedé escuchando los gritos y las risas de los chicos.No quería comer, no podía. Solo de mirarlo me sentía mal.
No puedo volver a coger peso, a los catorce años era muy insegura sobre mi cuerpo, mis amigas eran delgadas mientras que yo no, después pude bajar de peso, pero ahora parece que vuelvo a pasar por lo mismo. No quiero volver a ser esa niña que se encerraba en su habitación a llorar y esconderse de los demás, pero lo soy.Cogí el sándwich y lo tiré por la ventana a unos arbustos. Espero que un gato se lo coman para no dejar ninguna prueba.
Pasó casi una hora cuando Mike volvió a la habitación y cerró la puerta tras él, como si se tratara de un espía.
-Vale, ya he vuelto -miró el plato vacío y sonrió -bien, vamos progresando -
A decir verdad me sentía mal por engañarle.
-Escucha, mañana los chicos y yo nos iremos un momento a una entrevista, luego volveremos aquí -yo asentí -pero puedes quedarte, aunque sería mejor que volvieras a casa, los chicos podrían estar buscándote -
-Que se vayan al infierno -dije sin pensar.
-Vale, pero no puedes esconderte para siempre, sobretodo porque estás trabajando con ellos y porque nosotros nos iremos a Australia en unos días -
-Está bien -él de acercó a mí y me revolvió el pelo -gracias por esto, sabía que podía confiar en tí -
-¿Y porqué no en Luke, Ash o Calum? -
-No sé, ellos son débiles, fáciles de descubrir, en cambio sabía que tú me ayudarías -