》Tiempos de hospital: Buenos tiempos《

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- Hola. - Dijo ella con una ligera sonrisa cuando Kakashi abrió la puerta de la habitación.

- Hola. - Respondió con la voz baja y sin ánimo, bajando su máscara tras notar que la habitación estaba vacía.

Su semblante era pesado y suspiraba seguidamente; estaba cansado.

- ¿Te quedarás a dormir conmigo hoy? - Se acomodó un poco en la cama de hospital.

- Así es - le sonrió con sus ojos -, ¿me das un espacio? - Sara asintió y se movió hasta el borde para dejarle la otra mitad, aunque la cama no era tan grande.

Kakashi se dejó caer boca abajo con cuidado de no maltratar a su esposa, se acomodó un poco y separando su rostro de la almohada le miró.

- Estoy tan cansado. - Admitió en un suspiro.

- Lo sé. - Le sonrió con ternura y comenzó a acariciarle el rostro pasando por sus mechones plateados e incluso bajando por su espalda.

- Sara... Sara - murmuró sintiendo el agradable tacto que conseguía adormecerlo -, ¿Qué haces? Por favor deja de hacer eso. - Le tomó las manos con las propias y la detuvo.

- ¿Por qué? - Preguntó extrañada.

- Porque sé lo que tratas de hacer. - Dijo con obviedad. - Por favor no lo hagas... - Susurró. - Quiero... permanecer despierto otro rato.

- Pero estás cansado y te estás durmiendo. - Le recriminó de manera suave.

- Mañana... tengo que irme temprano de aquí y... quiero hablar contigo - se levantó un poco del colchón para evitar la fuerte tentación de quedarse dormido -, quiero ponerme al día contigo... sólo un poco, ¿Entiendes?

- Entiendo... pero luego te haré dormir. - Tiró de su mejilla como a un niño.

Kakashi rió con suavidad. - Cuento con eso.

- Bien cuéntame. - Se acomodó de medio lado, flexionando su brazo y usando su mano para sostener su rostro. - ¿Cómo han sido estos agitados días? - Su otra mano tomó la de Kakashi y sacándose los guantes, comenzó a dibujar formas en ella.

El dio un suspiro exagerado. - Bueno, tu hijo definitivamente tiene tus pulmones. - Dijo con un pequeño tono burlón.

Ella rió con ganas. - No es cierto. - Dijo entre risas.

- Es demasiado pequeño para tanto ruido.

Ella continuó riendo hasta que poco a poco se fue apagando, ahora sólo tenía una sonrisa en el rostro, sonrisa que Kakashi observaba con atención.

- Kaede bueno, es la misma niña de siempre, pero como cualquier niño a veces hay cosas que no comprende... como que tengo que dormir al menos tres horas por día - Dijo gracioso.

- Puedo imaginarlo. - Dijo aguantando sus risas.

- Del resto todo está bien, en la torre Shikamaru hace lo posible por dejarme la menor cantidad de trabajo que pueda.

- Es muy amable de su parte.

- Si bueno, para algo le pago... ¿y tú?

Kakashi observó como su sonrisa se fue convirtiendo en una línea semi recta sobre sus labios.

- Nada nuevo... - Respondió en un suspiro. - Es... aburrido estar aquí, entiendo porque odias tanto venir a los hospitales. - Su sonrisa volvió a ser sincera por un momento. - No es que lo odie pero... es solitario y rutinario... extraño mucho a Kaede y quiero, de verdad, quiero ver más a Sakumo.... No lo trajiste hoy.

One-shots de《Kakashi Hatake》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora