》Por Dios, ya admitanlo《

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—¡Sara nee-chan! —Naruto corrió a abrazarse a su abdomen, que era donde llegaba su rostro. Sara acarició sus mechones rubios con una sonrisa dulce en sus labios.

Sakura también se acercó a ella más tímida. Cuando Naruto se separó Sara le acarició el cabello a la niña.

—¿Cómo están niños? Buenos días, Sasuke.

—Muy bien, ¿Vas a acompañarnos? —dijo emocionado el rubio.

A Sara le daba ternura y lástima casi por igual, se daba cuenta de que le hacía falta tanto cariño, porque a cualquier indicio de un buen trato él parecía no querer que acabara nunca. Se le arrugaba el corazón al saber cómo lo trataban los demás por la bestia que llevaba en su interior. Pero él no era un mal niño, tampoco era su culpa.

—¿A dónde? —preguntó curiosa.

—Vamos a entrenar con Kakashi-sensei, debería venir a vernos —explicó Sakura con un ligero sonrojo en sus mejillas.

De verdad, Sara juraba que ambos niños eran totalmente adorables.

—Mm, no lo sé, él no me invitó, quizá sólo quiere estar con ustedes.

—¿Eh? Pero qué dice, si él se pone de buen humor cuando la ve 'dattebayo', ¡Vamos, vamos!

Naruto tomó su mano y la empujó por la aldea, a la joven no le quedó de otra que seguirlo. Sakura iba tras ellos. Sasuke camibana desde más atrás. Al llegar al campo de entrenamiento esperaron por varias horas, Sara comenzaba a aburrirse, se habría ido de tener algo mejor que hacer y no querer desilusionar el corazón de Naruto, quien ya tenía horas diciéndole todo lo que le haría a Kakashi y que se fijara muy bien en él porque hoy si iba a vencerlo.

El Jonin apareció luego de un rato, montado sobre un rama y con su libro en una de sus manos, no parecía sorprendido de verla ahí, Sara suponía le había olido o algo similar, menos mal se había colocado desodorante esta mañana.

—Buenos días, niños.

—¡Llega tarde! —le reclamaron Sakura y Naruto al mismo tiempo, incluso Sasuke le dirigió una mirada molesta.

—Ah, es que me perdí en el sendero de la vida —su tono era tan monótono que parecía casi muerto.

Sara alzó una ceja hacia él.

—¿Siempre llegas así de tarde? —le preguntó.

—¡Si! —gritaron ambos niños.

—Mm, no siempre —dijo rascándose la nuca —¿Siempre invades entrenamientos ajenos?

—No estoy invadiendo nada, tus alumnos me invitaron —les señaló con media sonrisa. Kakashi le devolvió el gesto tras su máscara, ella pudo notarlo.

—Como sea, hoy aprenderán a correr por el agua.

—¡¿Eh?! ¡Pero si ya sabemos eso! —Naruto comenzó un berrinche.

—No es lo mismo caminar que correr, además, no será tan sencillo, aprendieron a caminar sobre una superficie tranquila, pero el agua no todo el tiempo es así, ¿Quieres servir de ejemplo, Naruto?

Él avanzó hacia el lago enfurruñado y se paró sobre el agua, Kakashi dió una fuerte patada al lago que hizo temblar las olas, desestabilizando al genin y empapándolo.

—Bien, comiencen. Primero aprendan a correr, luego mejoraremos su equilibrio.

Los otros dos se acercaron al pequeño lago también y comenzaron a aplicar Chakra en sus pies para intentar correr, en ocasiones pisaban muy fuerte y rompían la pequeña barrera del agua mojándose.

One-shots de《Kakashi Hatake》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora