One-shots de《Kakashi Hatake》

》No de Nuevo. ¿Regalo o Castigo?《

— No puedo hacerlo.

— Kakashi por favor, tu eres el que mas puede manejarla

— Tsunade, no puedo hacerlo.

— Kakashi no esta en discusión.— El peliplata soltó un cansado suspiro. — Esta bien. — fue su respuesta.

—  Esta en el balcón. Vamos.

Ambos shinobis salieron de la oficina del hokage en dirección al balcón del edifico. Conforme se acercaban, Kakashi podía ver su espalda. Era ella, de nuevo. Trago duro y siguió caminando hasta situarse detrás de ella.

— Sara — Llamó la ex-Hokage al lado de el actual Hokage. La aludida volteó al oír la voz de la Quinta.

— No estoy listo para esto.— murmuró para si mismo, pero Tsunade lo escuchó perfectamente.

Su mundo se detuvo en ese momento, sintió que le faltaba el aire, era ella, ese era.... ese era su rostro, de nuevo.... volvía a verla...., sentía una opresión en el pecho, justo en lugar donde se alojaba su acelerado corazón. Luego, creyó morir. Ella le sonrió, como extrañaba esa sonrisa, esa mueca de felicidad, no se comparaba nada a ver las  fotos de ella, que guardaba con tanto recelo, intentó decir algo cuando la vio acercarse, pero no pudo.

— Hola...— Dijo con una bonita sonrisa, mas no recibió respuesta por parte de él, aún no podía articular palabra alguna. Sentía que su corazón saldría de su pecho en cualquier momento.

Ella entornó los ojos cambiando su sonrisa por una mueca de preocupación, acercó sus manos al rostro de el y colocó una palma en cada mejilla. Su tacto, como lo anhelaba, día y noche, y ahora, le parecía irreal. Entonces sacándole de su ensoñación, ella habló de nuevo.

— Te ves cansado Hatake.— De nuevo esa forma de llamarle. Claro que estaba cansado, desde hacía un tiempo que su única felicidad era volver a casa por ciertas personitas que lo esperaban. Si no fuera por ellos, su dolor fuera aún mas grande, la extrañaba mucho, estaba mas delgado, tenía unas, bastante, remarcadas ojeras bajo sus ojos opacos. Entonces, no supo cuando pudo articular palabra, o cuando abrió la boca para hablar, simplemente lo dijo sin pensar.

— Lo estoy. De echo, estoy muy cansado.

— Tsunade me dijo que tienes mucho trabajo como Hokage, no deberías exigirte tanto. — reprochó ella, tal y como lo hacía cuando excedía su uso del Sharingan en aquel entonces.

Tsunade quien veía la escena en silencio, sabía el doble sentido de las palabras del Hokage, no solo estaba cansado por el trabajo. Pero no pensaba aclararselo a la chica quien no tenía ni idea del esfuerzo que hacía kakashi para no romper a llorar como un niño y abrazarla.

— Bueno....— interrumpió la Godaime. — Basta de presentaciones, te quedarás en la casa de Kakashi mientras encontramos la forma de devolverte a tu tiempo, ¿de acuerdo?

Apartó la vista de él. — Claro. — volvió a sonreír, esta vez a la Ex- Hokage.

Tsunade dió media vuelta, empezando a caminar de regreso, Kakashi la siguió en silencio, Sara quedó un poco extrañada, Kakashi actuaba un poco raro y además, estaba muy tenso.

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Narra Sara:

No volvió a dirigirme la palabra en todo el día, nisiquira me miró, estaba actuando muy extraño y... parecía triste, me dolía verlo así, estaba demacrado, se veía agotado, pero, mas mentalmente que en lo físico. Luego de que arreglaran algo él y Tsunade, salió y me hizo una seña para que lo siguiera, Salimos de la Torre Hokage y comenzamos a caminar por una calle que no conocía, nunca había ido por acá. Decidí hablarle, le pasaba algo así que... intentaría ayudarlo.