Only Fans {Erick Pulgar}

Capitulo 112.

Alondra's POV.

El Tucu me había comprado el pasaje para el día miercoles en la noche pues de esa manera, yo estaría llegando el jueves en la tarde y así, mi visita, caería justo en los pocos días que tiene de descanso.

Había conversado tanto con la mamá del Erick como con la Sherry y a ambas les parecía bien la idea de que fuera a otro país a relajarme, sin embargo, sabía que por un lado les decepcionaba la idea de que no fuera para ir a ver al Erick.

A mi también me hubiese gustado que las cosas hubiesen sido diferentes pero era lo que tenía y había que adaptarse a eso.

- ¿Llevas todo?. - me preguntó la Barbara  desde el balcón de mi habitación pues estaba fumando un cigarro.

- Sip. - asentí echándole un vistazo a la maleta.

- ¿Ropa interior sexy?. - me miró coqueta y yo asentí. - ¿Condones?. - negué con la cabeza. - ¿Por qué?.

- Porque no pienso tirar con él. - dije obvia.

- Puede pasar y tienes que estar preparada. - me regañó. - ¿Con tu ex tiraban con o sin?.

- Siempre sin. - mordí mi labio dándome cuenta de lo irresponsable que eramos.

- Pero, weona. - golpeó su frente con la palma de su mano. - ¿Estai' segura que no estai' embarazada?.

- Segura. - la miré despreocupada. - Me cuidas a la gata. - con mi cabeza señalé al pequeño animal que dormía entre mis almohadas.

- Esa gata ya es más de mi hija que tuya. - ambas reímos. - ¿Cuando vuelves?.

- No sé. - junté mis labios en una sonrisa que más parecía mueca que sonrisa. - No pienso estar más de diez días ahí.

- ¿Por qué?. - le dio una última calada al cigarrillo y lo apago en el cenicero. - Deberias aprovechar de disfrutar harto, si tampoco es como que te vayas a perder de mucho por acá.

- Mientras más días pienso en quedarme, más infiel me siento. - me acerqué a ella prendiendo un cigarro.

- Seria muy tonta si te pregunto si aún lo amas. - ambas nos apoyamos en el barandal mirando las olas que se movían en una perfecta sincronización.

- Él dice que también me ama. - exhalé todo lo que había contenido.

- Tú no deberías tener contacto con él. - dijo seriamente.

- Solo hablamos para el día que tuve la pelea con su ex. - respondí despreocupada. - Lo sigo teniendo bloqueado de todos lados.

- Es difícil que lo dejes de amar porque vivieron todo muy intenso, muy rápido y muy bonito. - asentí de acuerdo con ella. - Pero no puedes estancar tu vida por eso.

- Tampoco es que vaya a estancar mi vida por él, solo quiero darme un tiempo para sanar. - sonreí. - Y, por lo mismo, no voy donde el Tucu con la intensión de que pase al más, no te niego que sería riquisimo pero nada amoroso, no ahora. - expliqué.

- Tiempo al tiempo. - finalizó ella.

Una vez la Barbara terminó de consumir su cigarro y yo el mío, ambas entramos ella con dirección a su habitación y yo con dirección a mi cama, donde me recoste para revisar mis redes sociales.

Desde el día de la pelea que no publicaba nada, tampoco veía las historias de los demás y mucho menos les comentaba o les daba corazón a las publicaciones que me aparecían, es decir, entraba a la Instagram de manera totalmente incógnita solo para ver que subían las personas a las que les tenía confianza y para conversar con el Tucu.