Capitulo 60.

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Alondra's POV.

El hecho de que el Erick haya subido la foto, me repercutió al punto de que la gente encontró mi Instagram con el cual trabajaba y comenzaron las especulaciones con respecto a si lo que yo hacía se considera o no infidelidad.

- No sé cómo sentirme con respecto a todo. - le dije al Erick mientras me pintaba las uñas. - O sea que, ¿si yo sigo trabajando, me tacharán de infiel y a ti de cornudo?.

- Yo creo que eso más bien depende de nosotros. - bostezó pues allá eran las ocho de la mañana y el Erick se dirigía al entrenamiento, mientras que yo aún no me había ni acostado a dormir.

- Tampoco sé porqué me preocupo si tú aún no me haz pedido ser tu polola, así que, técnicamente aún soy soltera. - reí ya que sabía que eso lo iba a molestar.

- No empieces, Alondra. - dijo seriamente.

- ¡Es verdad!. - reí fuerte.

- ¿Quieres ser mi polola?. - me preguntó rápidamente.

- Sí. - dije yo riendo.

- Ahora sí. - rió. - Eso depende de nosotros y como lo llevemos en la relación. - no pude evitar reír por lo random que había sido su propuesta, solo para poder decirme las cosas con, algo de, autoridad.

- Yo siento que es un trabajo como cualquier otro. - tomé aire. - Me refiero a que, yo no me sacó fotos totalmente desnudas, en todas las fotos y vídeos salgo con ropa interior. - exhalé. - Por lo que, si tu pones en una balanza el trabajo de una modelo de ropa interior versus el mío, es básicamente lo mismo, con otro nombre y otro propósito pero lo mismo. - dije explayándome.

- Sí, te entiendo y te encuentro la razón, pero tienes que dejar de pensar en lo que dice la gente porque no siempre pensaran igual que tú. - tocó la bocina. - Puta gente de mierda. - comenzó a quejarse.

- Relajate. - soplé las uñas que me había pintado.

- Eso intento pero la gente no coopera. - dijo enojado. - En fin, eso, amor. - suspiró. - No sé que más decirte.

- Tengo que comenzar a hacerte caso. - me acosté dejándo mis pies en alto para que no se corriera la pintura.

- Si. - afirmó. - Así vivirás más feliz.

- ¿Igual de feliz que tú después de lo que pasó recién o cómo?. - pregunté riendo para molestarlo.

- Sí, igual de feliz que yo. - rió pues ya se estaba acostumbrando a las bromas pesadas que le hacía. - Chinita. - me dijo. - Te dejo porque ya estoy llegando.

- Bueno. - bostecé. - Yo iré a fumar y luego me iré a dormir.

- ¿Te despierto?. - me preguntó.

- Sí. - tomé el encendedor y la pipa. - Despiertame tipo 1 o 2 de la tarde de allá. - abrí el ventanal y salí.

- Bueno. - cerró la puerta del auto. - Te quiero.

- Yo también te quiero. - le dije sonriendo aunque él no me pudiese ver.

- Hablamos después. - cortó la llamada.

Cargué la pipa con un poco de marihuana, tomé el encendedor, puse mi boca en la pipa y prendí el encendedor aspirando del contenido. Luego de unos segundos exhalé y tocí por lo fuerte.

Repetí mi accionar tres veces más cuando me empecé a sentir lo suficientemente relajada como para irme a dormir, sin importa si había secado el esmalte de mis uñas.

Me paré del puff donde me había sentado para fumar, abrí el ventanal e ingresé a mi pieza. Me acosté en medio de la cama, dejé el calienta cama en el nivel uno y comencé a revisar mis redes sociales.

Only Fans {Erick Pulgar}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora