Only Fans {Erick Pulgar}

Capitulo 40.

Alondra's POV.

Me emocionaba saber que el Erick quería que yo estuviese a su lado a pesar de los pequeños roces que habíamos tenido. Sin embargo, si le respondía, íbamos a terminar por pasar el límite y eso era algo de lo que habíamos hablado previamente pues ambos nos lo teníamos prohibido.

- Haré como que te creo. - intenté desviar la conversación.

- Es verdad. - sentenció.

- Bueno. - callé. - Y... ¿Cómo te ha ido con tus compañeros?. - pregunté cambiando el tema.

- Bien. - suspiró. - Algunas veces no los entiendo, pero intento llevarme bien con ellos. - calló un momento. - Hoy me pasó algo raro con el Charles, el Huaso y el Carlitos.

- ¿Qué pasó?. - reí intentando no imaginar situaciones tan irreales a pesar de la vola' en la que estaba.

- Cuando te vea te cuento. - odiaba cuando la gente hacía eso.

- Dime ahora o me enojo. - obvio no me iba a enojar porque sino se me iba a bajar la vola.

- Te digo cuando te vea porque es complicado de contar. - lo escuché reír pero a mi no me hacía gracia. - Es chistoso, lo juro. - paró de reír, o por lo menos lo intentó.

- Bueno. - dije fastidiada pero controlándome porque tampoco quería pelear y no me costaba nada esperar. - Estaba calculando. - me callé para encontrar la mejor manera de explicar lo que iba a decir.

- ¿Calculando qué?. - esperó a que yo siguiera hablando.

- Calculando, o sea, más que calculando, lo que pasa es que me quiero comprar un auto y aquí viene la parte donde calculo, porque imaginate que el que quieeo está a casi 80 palos y eso que es del 2014. - tomé aire arrepintiendome por haber hablado tan rápido. - Entonces, para comprarme uno de último modelo tendría que vender mis dos riñones en el mercado negro o si no jamás lo podría comprar. - terminé por explicar.

- ¿Cuál te quieres comprar?. - preguntó curioso.

- Dejáme ver como se llama que siempre se me olvida. - puse la llamada en altavoz para meterme a google y buscar el modelo. - Yo lo busco como "Mercedes G Wagon". - le dije y me salí de google.

- Voy a buscarlo. - dijo él, por lo que lo esperé. - Son las medias maquinas.

- ¡Sí, son hermosos!. - por fin alguien comprendía mi amor por ese tipo de vehículo. - Pero son super caros. - eso era lo único que me impedía tener la meta de comprarlo pues iba a terminar de pagarlo cuando tuviese 80 años, si es que llego a esa edad. - Así que me conformo con un Chevrolet Spark Gt.

- Esos son super chicos. - se opuso él.

- Sí, pero soy soltera sin hijos entonces pa' qué quiero más. - me encogí de hombros. - Lo más grande que aspiraría sería a un jeep Kia Sportage.

- Ya. - dijo él. - Ese es más bonito.

- En blanco me gusta. - añadí.

- En uno blanco te verías bien. - agregó coqueteando.

- Yo en todo y con todo me veo bien. - reí aceptando su coqueteo. - Es bonito soñar.

- Pero si lo puedes lograr. - me animó.

- Quiero pagar mis estudios primero. - dije recordando que esos estudios serían los que me sacarían de lo que estaba haciendo.

- ¿Falta mucho para eso?. - preguntó curioso.

- Me atrasé en muchas mensualidades y matrículas, pero. - tirité comenzando a sentir el aire fresco. - La universidad me lo perdonaba, entre comillas, obvio. - añadí. - Porque mandaba cartas explicando la situación, a las finales se cansaron de esperarme y debo como 2 palos, un poco más. - suspiré. - He abonado un poco igual, ya no me falta tanto. - dije para que no pensara que debía mi alma.