Recuerdos de un Nuevo Futuro

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Suspiro agotado, parece que hay situaciones que simplemente no cambiarán, por más veces que se repitan. Por lo menos esta vez Shinobu no le dijo que todos lo odian.

Llegaron a la sede y miro a la mayoría de los pilares, Shinobu le deseo suerte y fue con su hermana, quien platicaba con Mitsuri, Kyojuro y Sabito, aunque este último se alejo en cuanto diviso al pelinegro e intercambio unas cuantas palabras con la menor.

-Ven conmigo – dijo jalándolo de la mano a un lugar más apartado, se detuvieron al lado de la finca, en un punto donde los otros pilares no los pudieran ver – Dime por favor que esto no es por aquello Giyuu – dijo bajo.

-Depende.

-Lo sabía – rodo los ojos y apoyo la frente en la mano – ¿Qué paso?

-Ayer surgió una misión urgente, encontré a Tanjiro. Shinobu quería matar a Nezuko, pero no la deje hacerlo, luego de varios detalles sin importancia llegamos a este punto – escucho el bufido de su pareja.

-Sí, me dijo que estabas muy atento a un pelirrojo – se cruzo de brazos – Demasiado atento.

-Exagera, solo limpie una que otra herida suya – se justifico. Sabito suspiro rendido.

-¿Estás lastimado? – Giyuu negó con la cabeza - ¿Golpe, rasguño, corte, nada?

-No...

-Bien – le alzo el rostro y beso su nariz – Espere mucho para esto.

-S-Sabito – enrojeció avergonzado.

-Unos... ¿Cinco meses? – sonrió emocionado – Ya no importa, quiero ver el juicio cuanto antes.

-... Ah... Te referías a eso – murmuro.

-Claro – volvió a tomarle la mano y la beso – Vamos de una vez. A menos que quieras hacer algo aquí y ahora – abrazo su cintura. Giyuu bajo la mirada enrojecido hasta las orejas – Te extrañe.

-Yo también – lo abrazo y conecto ambas bocas en un beso que fue gustosamente correspondido.

Sus labios se movían en los ajenos con la necesidad de unirse, reconocerse y amarse, era un beso amoroso, sin prisa ni deseo de nada más.

-¡Chicos! – se acerco animosa. Se separaron de inmediato – El acusado ya llego, es lindo – los tomo de la mano y los llevo de regreso al jardín – Ahí está – apunto y los mayores siguieron su dedo.

Muichiro, Tengen, Kyojuro, Shinobu, Kanae y Gyomei rodearon al cazador inconsciente, mientras el hombre que lo trajo trataba de despertarlo. Sabito amplio su sonrisa y Mitsuri corrió para unirse al grupo. Giyuu se coloco en un lugar apartado, seguido por el otro pilar.

Tanjiro despertó y Uzui fue el primero en hablar luego de analizarlo con la mirada.

-¿Es él? Pensé que el espadachín que viaja con un demonio sería más llamativo, pero es de lo más normal.

-¡Sí! Vamos a celebrar su juicio, ¿cierto? – sin dar tiempo a responder continuo – ¡Entiendo!

-¿Quién...? – antes de terminar el kakushi sometió su cabeza contra el suelo.

-¡No hables! ¿No sabes donde estas? Estas frente a los pilares.

El menor de cicatriz miro a cada uno de las personas frente él.

-Esta es la sede de los asesinos de demonios. Estás a punto de ser juzgado Tanjiro Kamado-kun – explico – Antes de iniciar el juicio hay que explicar de qué se te acusa.

-¡El juicio no es necesario! – interrumpió energético –Proteger una demonio va contra las normas. ¡Podemos solucionarlo nosotros! ¡Decapitémoslo junto al demonio!