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Cuando vuelvo a mi habitación con mi pequeña, encuentro una escena horrible.

Stella está sentada en la cama llorando en silencio mientras oigo su respiración.

Parece que está temblando.

Su mirada está perdida.

Se lleva una mano al pecho y llora más alto intentando respirar bien.

—Stella —digo asustado.

No dice nada ni me mira.

Dejo a Felice en la cuna con cuidado y me siento delante de mi novia.

Está teniendo un ataque de ansiedad.

Acaricio su espalda acercándome más a ella hasta quedar a su lado.

Descansa su cabeza en mi hombro y abrazo a la persona que amo.

—Nelson está aquí —dice asustada—. Les va a hacer daño.

—¿Nelson? —toco su pelo rubio mientras asiente.

—Es el chico más tóxico y maltratador que he visto, Thomas. Es un monstruo que le hizo pasar muchas cosas a mi hermano. Dante no se merecía eso y ahora ha aparecido.

Se echa a llorar y abrazo más fuerte su cuerpo.

—Estarán bien. Estarán bien, cariño.


Desayunamos mientras Stella tiene el chat de nuestro grupo abierto.

Nadie ha dicho nada.

Deja la cuchara dentro de la taza de leche y llama a alguien.

—Coraline, ¿estáis bien? —dice y sonríe un poco.

Puedo escuchar una vocecita adorable.

—Me alegro mucho de que estéis bien, Graziella. Quiero verte pronto, pero quédate en casa hoy, ¿vale?

Se queda en silencio y vuelvo a escuchar esa vocecita, pero no entiendo lo que dice.

—Sé que te encanta estar fuera, pero hoy es mejor que te quedes en casita. Además, cuida mucho a tus mamás.

Habla mientras controla sus lágrimas.

Cuelga y vuelve a llamar a alguien.


Stella

Espero a que mi hermano responda la llamada.

Han pasado 2 horas desde que Ethan envió ese mensaje.

No responde.

Corro hacia la ventana de la cocina viendo una gran patrulla de policías pasar cerca de mi casa.

Felice llora asustada en los brazos de Thomas.

Trago saliva.

Algo ha pasado.

Nunca salen tantos policías a las calles.

Lo están buscando.

Sé que lo están buscando.

Ha hecho algo. Tal vez le ha hecho daño a alguien y ahora lo están buscando.

Me imagino a Nelson de fugitivo.

No me sorprende. Me asusta mucho.

Mi hermano no responde y esto me lleva casi a un ataque de ansiedad.

Thomas intenta tranquilizarme.

Lloro muy asustada.

—Cariño, mírame —me dice y lloro asustada mientras mi cuerpo tiembla.

Stella |Måneskin|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora