0.6

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Narra Iván.

-¡Vicente! Cabron no mames- dijo Serafí nervioso.

-Wey que pedo no mames- dije yo viendo a la muchacha y a Vicente de manera intercalada.

Ella se percató de que el estaba inconsciente, por lo que le hablo a creo que era su novio, pues le hablaba muy cariñoso el hijo de la verga.

-Bebe, ven chulo, ayúdame que un wey se desmayo o quién sabe a la chingada.

Pinche vieja grosera a la verga, ta chulisima, pero parece que lleva un albañil en viernes recién pagado....¿Chulo? ¿Le dijo chulo? Que no me a visto a mi o qué.

-Ya voy princesa- ¡Vaya que si es una princesa!

Ella se alejo no sin antes darnos una sonrisa, ella ya me tiene a sus pies, y ni siquiera lo nota. Mientras el vato este me miraba fijamente casi matando me con la vista, una sonrisa ladina salió de mis labios.

El vato le puso tequila a Chente, este poco a poco iba reaccionando.

-Tomate ésto- dijo el wey dándole un termo a Chente.

Este lo tomo, y ¡Verga! Me escupió todo el hijo de la chingada.

-Es tequila compa, no mames- dijo esté sobando su garganta mientras que Ovidio y Serafín estaban cagados de la risa.

-Es para que se presión se ajuste, y pa que se le pase el susto compa, no traía coca pero si tequila- dijo esté sonriendo. Al chile el vato si esta carita, pinche fachoso.- Soy Fabricio.

-Un gusto compa....- Ovidio no termino de hablar por qué otro wey con la misma cara que este lo interrumpió.

-E Fabricio, ¿Está bien el vato?, Ali está muy asustada- ¿Ali? Ese es su nombre, o es alguna abreviatura- Mucho gusto compa, soy Fernando.

-Un gusto compa, y estoy bien, dígale a la muchachita para que no se preocupe- dijo Vicente dándole una sonrisa- Soy Vicente. Oiga compa, uste' dijo que ocupaba coca para que mi presión se calmara y la mamada vea?- dijo preguntándole al Fabri.

-Simon carnal-

-Serafin, ve a comprarme una andale- dijo Chente

-Aqui traigo Chente, ¿Cómo cuánta ocupa oiga?- le pregunto el Será, mientas que Ovidio lo miraba con el celo fruncido.

- Pues con poquita tiene oiga- le contesto Fernando.

El pinche pendejo de Serafín saco de su cartera una bolsita, una bolsita de coca el pendejo.

-E compa de esa coca no- dijo riendo Fabricio, mientras que yo lo miraba serio, se supone que debemos de tener un perfil serio. Aparte ¿Que no solo la vendemos, no la consumimos?

-Mi padrino sabrá de esto Serafin- le dice Ovidio con un tono serio, que nos sorprendió a todos. No era secreto que nadie consumía desde mi sobredosis meses después de que mi Cali desaparecido.

Los vatos se miraban entre ellos, cómo incómodos o tratando de decir algo.
Pero Chente les ganó la palabra.

-Gracias por ayudarme, no cualquiera, agradezcale mucho a la muchachita por preocuparse.- dijo esté sonriendo y dándoles la mano, todos repetimos su acción.

-Nombre compa gracias a Ali fue que nos dimos cuenta y aquí estamos jaja, a Ali o le agradaron o anda muy de buenas, la hija de la verga es bien  cabrona,  y aunque tiene un corazón enorme, la hija de la chingada no es nada más que eso- dijo Fabricio y Fernando le daba la razón.

- E CULOS, MUEVANLAS, TENEMOS QUE LLEVAR A ALI AL RANCHO, SE PUSO MAL- Dijo un wey que se parece mucho a estos, otro salió al mismo tiempo que este, también birn parecido.

𝐋𝐚 𝐩𝐫𝐢𝐧𝐜𝐞𝐬𝐚 𝐩𝐞𝐫𝐝𝐢𝐝𝐚 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora